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Wenzhou (Lunes, 28-10-2019, Gaudium Press) En una maniobra que es ya acostumbrada por parte de la autoridades chinas, el décimo aniversario del fallecimiento del anterior Obispo de Wenzhou, Mons. Lin Xili, estuvo marcado por las acciones para limitar la conmemoración del prelado por no haber sido miembro de la Asociación Patriótica, el órgano oficialista de control sobre la vida de la Iglesia.
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| Mons. Shao Zhumin, Obispo de Wenzhou, China. Foto: UCANews. |
En esta ocasión, su sucesor, Mons. Shao Zhumin, fue el objetivo de las maniobras y días antes de la conmemoración fue retenido por personal de seguridad nacional para someterlo a jornadas de adoctrinamiento político, según denunció la revista especializada Bitter Winter. En ausencia del prelado, las autoridades informaron a los encargados de la pastoral que cualquier homenaje a Mons. Lin Xili estaba prohibida, ya que «fue un Obispo ilegal quien no era reconocido por el gobierno». Cualquier intento de conmemoración en su tumba sería castigada con la demolición de la misma.
En el día 04 de octubre, aniversario de fallecimiento del Obispo, más de 500 miembros de las fuerzas de seguridad acordonaron las vías de acceso a la tumba del prelado y realizaron actividades de vigilancia, incluso dentro de los templos católicos circundantes, para evitar que se celebraran Eucaristías por el alma del Obispo. Pasada la fecha del fallecimiento del Obispo, las autoridades aún retuvieron a Mons. Shao Zhumin varios días más, siendo liberado el día 08 de octubre.
«El Partido Comunista Chino siempre teme que su régimen no se mantenga estable, y el gobierno vive en un estado de pánico extremo. Es por eso que toma medidas enérgicas contra las religiones» expuso a Bitter Winter un sacerdote local cuya identidad fue reservada por la revista. «Es, en esencia, el demonio».
La revista informó que el Obispo ya enfrentaba la prohibición de viajar fuera de la ciudad e incluso era monitoreado en su vehículo a través de un dispositivo de ubicación satelital. Las presiones para intentar inscribirlo en la Asociación Patriótica incluyeron el corte en el suministro de electricidad y agua y sellamientos de dependencias de la Iglesia. Las autoridades prohibieron al prelado organizar reunión alguna mientras se encuentre fuera de la organización. El Obispo también rechazó conformar un «comité administrativo» con el mismo objetivo de control.
Con información de Bitter Winter.
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