Negación de la comunión eucarística a candidato estadounidense es consistente con las normas diocesanas

Florence (Jueves, 31-10-2019, Gaudium Press) Un sacerdote parroquial en Florence, Carolina del Sur, Estados Unidos, llegó inesperadamente a las páginas de los periódicos. El pasado 27 de octubre el P. Robert Morey le negó la comunión sacramental al candidato presidencial mientras se encontraba de viaje en el lugar a causa de su apoyo público al aborto legal en Estados Unidos. El hecho, reconocido por el sacerdote ante los medios de comunicación, suscitó una gran variedad de reacciones pero es por completo consistente con las normas de la Iglesia local.

«Debido a que el apoyo a la legislación pro-aborto es gravemente pecaminoso, esas personas no deberían ser admitidas en la Sagrada Comunión», afirma un decreto de la Diócesis de Charleston, Estados Unidos. Foto: Camilo Ríos.

«Lamentablemente, el domingo pasado, tuve que rechazar la Sagrada Comunión al ex vicepresidente Joe Biden», afirmó el P. Morey en un comunicado oficial sobre el suceso. «La Sagrada Comunión significa que somos uno con Dios, entre nosotros y con la Iglesia. Nuestras acciones deberían reflejar eso. Cualquier figura pública que defienda el aborto se coloca fuera de la enseñanza de la Iglesia».

La explicación del sacerdote concuerda con el decreto «Dignos de Recibir el Cordero: Católicos en la vida política y la recepción de la Santa Comunión», vigente en la Diócesis de Charleston, donde ocurrieron los hechos. El documento recuerda que «los católicos en la vida política tienen la responsabilidad de ejemplificar en su servicio público esta enseñanza de la Iglesia y trabajar por la protección de toda vida inocente». Ante una evidente contradicción entre el testimonio público y la doctrina de la Iglesia, la norma evita un posible sacrilegio al excluir del sacramento a los fieles que incurren en esta situación.

«Los funcionarios públicos católicos que constantemente apoyan el aborto a pedido están cooperando con el mal de manera pública. Al apoyar la legislación pro-aborto, participan en el pecado grave manifiesto, una condición que los excluye de la admisión a la Sagrada Comunión, siempre y cuando persistan en la posición pro-aborto», afirma el decreto. «Debido a que el apoyo a la legislación pro-aborto es gravemente pecaminoso, esas personas no deberían ser admitidas en la Sagrada Comunión».

Este deber fue expresado por el sacerdote en la explicación de su decisión de negar la Santa Comunión al candidato. «Como sacerdote, es mi responsabilidad ministrar a las almas encomendadas a mi cuidado, y debo hacerlo incluso en las situaciones más difíciles», recordó el P. Morey. «Mantendré al Sr. Biden en mis oraciones».

Con información de Catholic World Report.