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Hong Kong (Martes, 12-11-2019, Gaudium Press) Mons. Ha Chi-shing, Obispo auxiliar de Hong Kong, se pronunció sobre la muerte de Chow Tsz-lok, un estudiante de segundo año de la Universidad de Ciencia y Tecnología, quien cayó de un estacionamiento durante los enfrentamientos con las autoridades en medio de las grandes protestas ante un posible aumento de la influencia del régimen chino sobre el territorio. La situación tratada por el prelado empeoró aún más después de su declaración al registrarse la herida de otro estudiante, quien recibió un disparo a quemarropa en el pecho por parte de un policía a pesar de estar completamente desarmado.
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| Mons. Ha Chi-shing, Obispo auxiliar de Hong Kong. Foto: Diócesis de Hong Kong. |
«Sentí un gran dolor al recibir noticias de la muerte del hermano Chow Tsz-lok», expresó el Obispo auxiliar durante una reunión conmemorativa por su fallecimiento, según informó AsiaNews. «Esta noche estamos aquí para conmemorarlo, recordarlo y orar por él: que nuestro Señor misericordioso lo reciba y lo deje descansar en paz».
El prelado recordó que el joven es la primera víctima fatal de las protestas en contra de la propuesta de ley de extradición a China, que se han prolongado cinco meses. «¿Pero cómo estaba herido? ¿Cómo y por qué se cayó del estacionamiento? ¿Y cómo y cuándo respondieron los servicios de emergencia? Todo esto plantea grandes preguntas entre la gente», afirmó el prelado. «La muerte es a menudo una fuente de dolor y tristeza, y la muerte súbita de un joven nos desagrada y nos duele aún más. ¡Pero la muerte del hermano Chow también fue dudosa y sospechosa!».
Mons. Ha Chi-shing hizo un llamado a valorar y amar la vida y declaró que «ninguna persona de conciencia puede aceptar» el hecho de que un fallecimiento se registre en circunstancias tales. «En la sociedad civil, incluida la policía, hay voces que piden un tribunal forense. Esperamos que el gobierno pueda escuchar estas voces y que a través de la Corte forense podamos conocer la verdad, hacer justicia y, sobre todo, consolar a la familia de corazón roto», comentó.
El Obispo alertó sobre la continuidad de los enfrentamientos y la posibilidad de que empeoren si no se aclara el caso del joven universitario. Igualmente alertó sobre la desconfianza en que las instituciones actuales puedan realizar una investigación adecuada. «Por esta razón, pedimos al gobierno que escuche la opinión pública, establezca un comité de investigación independiente y descubra toda la verdad», indicó. «Haría bien en resolver este estancamiento y dejar que la sociedad regrese al camino de la paz».
El prelado elogió que el joven tuviera «un corazón que ama a Hong Kong y un corazón que está dispuesto a contribuir a la sociedad». «Ahora vamos a entregarlo al Dios todopoderoso y misericordioso. Hermano Tsz-lok, ¡descansa en paz!», concluyó.
Con información de AsiaNews.
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