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Venecia (Miércoles, 20-11-2019, Gaudium Press) Ni el ‘aqua alta’, que ha ocasionado inundaciones en Venecia, ha impedido que los fieles de la ciudad italiana se den cita a la tradicional fiesta y peregrinación a Santa María della Salute – Virgen de la Salud -, con el antiguo voto de la ciudad. Toda una fiesta veneciana con siglos de historia.
Los homenajes a la Virgen comenzaron desde el sábado 16 de noviembre con celebraciones Eucarísticas y el rezo del Santo Rosario, momentos que se han extendido hasta el martes 19 de noviembre, cuando ha tenido lugar la inauguración oficial de la fiesta en honor a la ‘Madonna della Salute’ con la apertura y bendición del puente votivo en el Gran Canal a las 14:30 horas, y el trayecto hacia la Basílica de Santa María de la Salud realizado por el Patriarca de Venecia, Cardenal Francesco Moraglia, junto con el alcalde de la ciudad, Luigi Brugnaro.
A las 15:00 horas, en el Seminario Patriarcal de la Salud tuvo lugar la presentación del libro «White Marble and The Black Death. Il marmo bianco e la peste nera» – «Mármol blanco y la peste negra» – que habla sobre la obra del altar mayor de la Basílica.
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| La fiesta veneciana a la Virgen de la Salud ha sido ocasión para pedir a Nuestra Señora poner su mirada sobre los afectados por el fenómeno del ‘acqua alta’ en la ciudad / Foto: Patriarcato di Venezia. |
Los homenajes han continuado el miércoles 20 de noviembre con la peregrinación diocesana de jóvenes en torno al lema «Madre, confianza nuestra». Itinerario que ha trascurrido en compañía del Cardenal Moraglia desde las 18:15 horas y ha estado marcado por la vigilia de oración de la víspera de la fiesta veneciana a la Madre de la Salud.
Para el jueves 21 de noviembre está previsto el cierre de las celebraciones con una solemne Misa que presidirá a las 10:00 horas en la Basílica de la Salud el Patriarca de Venecia.
La fiesta de la Madonna della Salute se originó en el año 1630 cuando la República Serenísima hace un voto de construir una nueva iglesia bajo el título de «Santa Maria della Salute», si cesaba la peste que amenazaba por destruir a la población.
Así, el entonces Patriarca de Venecia, Giovanni Tiepolo, realizó una promesa:
«Prometo solemnemente erigir en esta ciudad una iglesia y dedicársela a la Virgen Santísima, llamándola Santa María della Salute, y que cada año en el día en que esta ciudad sea declarada libre del presente mal, Su Serenidad y sus sucesores irán solemnemente con el Senado a visitar dicha iglesia en perpetua memoria de la pública gratitud por tanto beneficio».
Cuando culminó la peste, habían muerto 80 mil venecianos y otros 600 mil en el territorio de la Serenísima.
El escultor italiano Baldassare Longhena, fue quien estuvo a cargo de la construcción del templo, culminando los trabajos en noviembre de 1687.
En memoria de este hecho, todos los años, en noviembre se renueva el voto a Nuestra Señora de la Salud.
Oración de confianza de la ciudad de Venecia a la Virgen de la Salud del Cardenal Francesco Moraglia:
Querida Virgen de la Salud, que de siempre has vigilado a los venecianos y su ciudad, míranos con tu mirada maternal en estos momentos en el que sentimos toda nuestra fragilidad e impotencia. Ponemos en tus manos de Madre nuestras iglesias, nuestras casas, nuestras actividades, las personas que queremos y nosotros mismos.
Te pedimos te muestres a nosotros Madre de esperanza. De manera particular te pedimos que mires sobre los niños, sobre los ancianos, sobre los enfermos y sobre los pobres y quienes, en estas horas, están llamados a guiar nuestra comunidad con elecciones y decisiones no siempre fáciles y obvias.
Tu oración sostenga nuestras oraciones y aquellas de toda la ciudad que te reconoce como su protectora; preséntalas a Tu Hijo a quien invocamos en Venecia con el título, para nosotros tan querido, de Santísimo Redentor.
Con información de Patriarcado de Venecia.
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