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Santo Domingo (Martes 10-11-2009, Gaudium Press) Su Santidad, el Papa Benedicto XVI, expresó este domingo su pesar por la muerte del obispo emérito de Santiago, al norte de República Dominicana, monseñor Roque Adames Rodríguez, quien falleció el pasado 31 de octubre y cuyos restos fueron sepultados en la parroquia de la Asunción de la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra (PUCMM).
En un mensaje dado a conocer por el Nuncio Apostólico, monseñor Józef Wesolowki, el Papa otorgó el afecto y su bendición apostólica, como signo de fe y esperanza en el Señor resucitado.
«Deseo expresar mi profundo sentimiento de pesar a sus familiares, así como a ustedes que fueron testigos de su fecundo ministerio pastoral en este país», refiere el Pontífice en su comunicado dirigido a la comunidad católica y al pueblo dominicano.
Los restos del obispo emérito, quien este domingo cumpliría 81 años, fueron sepultados tras un velorio de una semana al que asistieron miles de feligreses, entre ellos empresarios, políticos y funcionarios del gobierno.
Una misa de cuerpo presente fue oficiada por el arzobispo de Santiago, monseñor Ramón Benito de la Rosa y Carpio, quien aseguró que no existen palabras para definir la larga trayectoria y la labor pastoral desarrollada en vida por el obispo fallecido.
El prelado dijo que monseñor Adames Rodríguez dejó grandes obras dentro y fuera de la Iglesia, así como en beneficio de la educación dominicana.
En el oficio religioso estuvieron presentes monseñor Gregorio Nicanor Peña, de La Altagracia; Rafael Felipe Núñez, de Barahona; Freddy Bretón, de Baní; Pablo Cedano, obispo auxiliar de Santo Domingo; Valentín Reynoso, auxiliar del Arzobispado de Santiago, y Juan Antonio Flores Santana, arzobispo emérito de Santiago. Además, monseñor Benito Ángeles y Agripino Núñez Collado.
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