Menú 
México (Miércoles, 11-11-2009, Gaudium Press) Con la presencia de 110 obispos y 20 sacerdotes, el lunes 9 comenzaron los trabajos de la 88ª Asamblea Plenaria de la Conferencia Episcopal de México, que tiene como objetivo estudiar y profundizar el papel de la Iglesia ante el tema de la inseguridad y la violencia, y elegir los dirigentes del organismo de la CEM para el trienio 2009-2012 y evaluar el servicio de las Comisiones Episcopales de la CEM, «para fortalecerlo por medio de una nueva estructura en el ámbito de la Misión Continental».
El arzobispo de Tlalnepantla y presidente de la Conferencia Episcopal Mexicana, Mons. Carlos Aguiar Retes, presidió la celebración eucarística de apertura de la asamblea en la Casa Lago-Sede en Cuautitlán Izcalli, municipio del estado de México.
Durante su homilía, Mons. Aguiar invitó a los obispos presentes a «renovar nuestra convicción y nuestro compromiso con Cristo para dar vida a nuestras estructuras de la CEM».
Citando las palabras del Papa Benedicto XVI en la Carta Encíclica SPE SALVI, Mons. Aguiar afirmó que «cada generación debe dar su propia contribución para establecer ordenamientos convincentes de libertad y bondad, que ayuden a la próxima generación al uso adecuado de la libertad y den también así, siempre dentro de los límites humanos, cierta garantía para el futuro».
Sobre el propósito de la 88ª Asamblea Plenaria, el presidente de la CEM dijo que «en esta consciencia, plenamente alerta para asistir y examinar nuestra contribución como iglesia particular, ahora nos detendremos para revisar y valorizar lo que nosotros hicimos en estos tres últimos años y lo que nosotros podremos hacer en los próximos tres».
El religioso saludó al nuncio apostólico en México, Mons. Christophe Pierre, así como al secretario general de la CEM, Mons. José Leopoldo González, y confió a todos los obispos presentes al Espíritu Santo.
Deje su Comentario