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Ceuta (Miércoles, 22-01-2020, Gaudium Press) El próximo 15 de febrero se abrirá en la ciudad autónoma española de Ceuta -ubicada en la orilla africana del estrecho de Gibraltar – un Año Jubilar Antoniano en el que se recordarán los 800 años de la llegada de San Antonio de Padua a las costas africanas.
El jubileo, concedido por la Santa Sede a la Cofradía de San Antonio del Monte Hacho, irá hasta el 16 de febrero del 2021, y de desarrollará en torno a diversas actividades que recordarán la figura del santo paduano, así como a los primeros franciscanos llegados a África.
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El inicio de este tiempo de gracia tendrá lugar en una fecha muy especial: cuando se conmemora la Traslación del Santo, que comúnmente se conoce como la «Fiesta de la Lengua».
El cierre del Año Jubilar igualmente será en una fecha significativa: para recordar cuando en el invierno del 1221 el santo, quien se encontraba enfermo de malaria, decide ser trasladado en un asno hasta Ceuta para partir nuevamente a su país natal. Aunque Dios quiso entonces algo diferente para Antonio.
Así durante el Año Antoniano habrán varias actividades de carácter litúrgico, pastoral, de catequesis, formación, de caridad, artísticas y culturales para celebrar los 8 siglos del paso de San Antonio por estas tierras, así como la llegada de los franciscanos.
Epicentro de los homenajes será la ermita de San Antonio situado en el monte Hacho, al que llegarán peregrinaciones, especialmente la que tendrá lugar para la apertura del tiempo jubilar.
Además, se realizará el Encuentro Internacional de Hermandades, Cofradías y Asociaciones de San Antonio, que se realizará en Ceuta del 23 al 26 de abril en torno al tema «San Antonio, luz y misericordia para la humanidad».
Llega a África siguiendo los pasos de los Protomártires de Marruecos
Era el año 1220 cuando San Antonio de Padua, desde Portugal, llegó a África siguiendo los pasos de los Hermanos Menores y Protomártires de Marruecos: los franciscanos Bernardo, Otón, Pedro, Acursio y Adyuto.
Arribó durante el otoño a Ceuta, donde permaneció hasta principios de 1221, cuando buscaba regresar su natal Portugal, mientras se hallaba enfermo de malaria.
En este viaje de regreso Dios le tenía preparado otro destino: el barco en el que se transportaba naufraga y va a parar a Sicilia. Una vez recuperado va hasta Asís donde se encuentra con San Francisco, confirmando así su elección como franciscano.
El paso de Antonio por Ceuta dejó su huella, donde se le honra de manera especial. Así lo demuestran dos ermitas edificadas en su nombre; una en el barrio Castillo, otra en el Hacho; así como la Cofradía creada en el siglo XVI.
Con información de Obispado de Cádiz y Ceuta, y Cofradía de San Antonio de Ceuta.
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