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Varsovia (Viernes, 31-01-2020, Gaudium Press) Mons. Romuald Kaminski, Obispo de Varsovia-Praga, Polonia, presidió las celebraciones en memoria del Beato Jerzy Matulewicz, Arzobispo y renovador de la Congregación de los Padres Marianos. La celebración se llevó a cabo en el Santuario de la Madre de Dios de Lourdes en la capital del país y, en su predicación, el prelado hizo énfasis en la particular acción de la Santísima Virgen en la historia de Polonia.
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| Mons. Romuald Kaminski, Obispo de Varsovia-Praga, Polonia. Foto: Episkopat News. |
«Recordamos la historia de grandes familias como los Franciscanos, Jesuitas, Dominicos, Paulinos y Palotinos, agradeciendo a Dios su presencia y compromiso pastoral», indicó el Obispo, según informó KAI. «Sin embargo, debemos recordar que estas comunidades religiosas vinieron a nosotros desde fuera. Mientras tanto, ya en el Siglo XVI, nuestro país dio luz a su propia familia religiosa, la cual fue fundada por el Padre Stanislaw Papczynski, la Congregación de los Padres Marianos de la Inmaculada Concepción de la Santísima Virgen María».
Mons. Kaminski recordó que la época del nacimiento de la congregación fue un tiempo de gran turbulencia para la nación polaca, caracterizado por las guerras y la escasez de sacerdotes. «La nueva congregación, cuyo carisma fue la difusión del culto de la Inmaculada, el cuidado por la salvación de los moribundos y cooperar en la proclamación de la Buena Nueva, fue un regalo de la Providencia Divina para nosotros», indicó el prelado.
El carácter mariano de la orden religiosa quedó inscrito en el alma de toda la nación polaca, como lo evidenciaron, por ejemplo, San Juan Pablo II y el próximo Beato Cardenal Wyszynski. «Ellos sabían perfectamente bien que el renacer auténtico vendría a través de la intercesión de la Santísima Virgen María», predicó el Obispo. «Fue Dios quien la puso en el camino de nuestra nación, en los caminos de la humanidad».
Con información de KAI.
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