En cada templo un espacio para entronizar la Palabra de Dios: propuesta de la Diócesis de Salamanca

Salamanca (Miércoles, 04-03-2020, Gaudium Press) La Palabra de Dios también es alimento para el alma, como lo es el Cuerpo de Nuestro Señor Jesucristo. Por esta razón la Diócesis de Salamanca está convocando para que en cada templo de la jurisdicción eclesial española se destine un espacio especial y digno para entronizar la Palabra de Dios.

Esta es la invitación que ha hecho Policarpo Díaz, Vicario de Pastoral de la Diócesis española, en un video que ha difundido el Servicio Diocesano de Comunicación Social:

«Hagamos en cada iglesia, en las medidas de las posibilidades, un pequeño espacio, un rincón sencillo, bonito, distinguido, donde podamos poner una vela y poner la Palabra de manera entronizada para que el pueblo de Dios pueda descubrir que aquí, en la Palabra de Dios, está presente el mismo Cristo que nos habla, que nos ama, que nos abraza y que nos invita a que abramos nuestros oídos y le escuchemos».

«No vale menos la Palabra de Dios que el Cuerpo de Cristo»: San Agustín / Foto: Fabián Cruz por Cathopic.

Señala que los Pontífices han animado a los católicos a darle un lugar primordial a la Palabra de Dios. Así lo hizo el el Papa Emérito Benedicto XVI en la exhortación ‘Verbum Domini’. Al respecto, Díaz, dice:

«Nos lo recuerda el Papa Benedicto XVI en ‘Verbum Domini’. Esta exhortación apostólica postsinodal sobre el Sínodo de la Palabra. Y lo recuerda citando al misal romano directamente: ‘Sin el reconocimiento de la presencia real del Señor en la Eucaristía, la comprensión de la Escritura queda incompleta. Por eso la Iglesia honra con una misa veneración, aunque no con el mismo culto, la Palabra de Dios y el Misterio Eucarístico. Y quiere y sanciona que siempre, y en todas partes, se imite este proceder, ya que movida por el ejemplo de su fundador, nunca ha dejado de celebrar el misterio pascual de Cristo, reuniéndose para leer lo que se refiere a Él en toda la escritura, y ejerciendo la obra de salvación por medio del memorial del Señor y de los sacramentos'».

Un llamado que ha hecho el Papa Francisco con la Carta Apostólica en forma de ‘motu proprio’ ‘Apertuit illis’, con la que se instituyó el Domingo de la Palabra de Dios, para que se celebre cada tercer domingo del Tiempo Ordinario. Este 2020 se ha conmemorado por primera vez el pasado 26 de enero.

Allí el Santo Padre dice: «las comunidades encontrarán el modo de vivir este Domingo como un día solemne (…) Será importante que en la celebración eucarística se entronice el texto sagrado, a fin de hacer evidente a la asamblea el valor normativo que tiene la Palabra de Dios».

En la Carta el Pontífice también destaca el «profundo vínculo entre la Sagrada Escritura y la fe de los creyentes», señalando que «la fe proviene de la escucha y la escucha está centrada en la palabra de Cristo».

Por eso el Papa habla de la invitación que hoy surge, y es «la urgencia y la importancia que los creyentes tienen que dar a la escucha de la Palabra del Señor tanto en la acción litúrgica, como en la oración y la reflexión personal».

Una importancia que hoy se hace visible con la propuesta que se ha puesto en marcha en la diócesis de salamanca, donde algunas iglesias ya han dispuesto un lugar especial para la Palabra de Dios, como la iglesia de San Julián donde se ha reservado un espacio para las Sagradas Escrituras con una vela iluminada y un cartel que dice la siguiente frase de San Agustín: «No vale menos la Palabra de Dios que el Cuerpo de Cristo».

Con información de la Diócesis de Salamanca.