Washington (Lunes, 16-03-2020, Gaudium Press) El próximo 25 de marzo, en la solemnidad de la Anunciación del Señor y en el aniversario número 25 de la encíclica ‘Evangelium vitae’ de San Juan Pablo II, la Iglesia católica en los Estados Unidos – desde el Comité de Actividades Pro-Vida de la Conferencia de Obispos Católicos del país (USCCB) – pondrá en marcha la iniciativa «Camina con madres necesitadas: un año sirviendo», que se extenderá hasta el 25 de marzo del 2021.
La propuesta está inspirada en el llamado que hizo el santo pontífice a evaluar y valorar los esfuerzos hacia la edificación de la cultura de la vida. Así, a través de un año de servicio, se busca un mayor acercamiento de la Iglesia hacia las madres embarazadas y madres que educan solas a sus hijos y están necesitadas.
En la encíclica, Juan Pablo II reafirmó la enseñanza de la Iglesia sobre el valor y el carácter inviolable de toda vida humana. En el documento (n. 95), el papa polaco lanzó a los fieles cristianos, y a la Iglesia en general, un desafío:
«Preguntarnos, con gran lucidez y valentía, qué cultura de la vida se difunde hoy entre los cristianos, las familias, los grupos y las comunidades de nuestras diócesis. Con la misma claridad y decisión, debemos determinar qué pasos hemos de dar para servir a la vida según la plenitud de su verdad».
La iniciativa es una convocatoria que el Comité de Actividades Pro-Vida de la USCCB viene realizando en las parroquias, para que desde allí se impulse el año de servicio acompañando a las mujeres embarazadas y madres en necesidad.
«Sabemos que las dificultades pueden ser inmensas para las mujeres con embarazos inoportunos, especialmente las mujeres que están en la pobreza. De acuerdo con las estadísticas de prestadores de ‘servicios’ de aborto, las mujeres que optaron por el aborto eran pobres, jóvenes y solteras: 75% tenían bajos ingresos, 60% tenían entre 20 y 30 años y 86% eran solteras», exponen en la Guía para la acción parroquial que han preparado los promotores de la campaña.
Allí explican que en las parroquias y vecindarios existen mujeres embarazadas y madres que educan solas a sus hijos y están pasando necesidad, pero en su desesperación acuden a otros lugares para pedir ayuda. Razón por la cual la iniciativa se centra desde las parroquias.
«Si bien muchos recursos para los embarazos se coordinan adecuadamente en los ámbito regional y diocesano, es más fácil acercarse a las madres que padecen necesidades en cada localidad. Con más de 17.000 parroquias en los Estados Unidos, la Iglesia tiene una posición única para alentar una colaboración de recursos en el ámbito local y para aumentar el conocimiento de ayuda disponible para madres y familias necesitadas», señalan.
Así, las parroquiales podrán convertirse en lo que el Papa Francisco ha llamado «islas de misericordia en medio del mar de indiferencia», acompañando durante un año a las mujeres gestantes y madres en dificultad.
Para llevar adelante la iniciativa, el Comité de Actividades Pro-Vida de la USCCB ofrecerá varios recursos pastorales y educativos con el objeto de que las parroquias puedan salir a la periferia y llevar esperanza, compañía y ayuda a las madres en necesidad.
«Por medio de estos esfuerzos conjuntos de las parroquias de todo el país, esperamos acercarnos más al día en que cada mujer embarazada necesitada sepa adónde recurrir a recibir ayuda, y el aborto sea simplemente impensable», puntualizan.
Con información de walkingwithmoms.com.
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