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Brasilia – Distrito Federal (Miércoles, 25-03-2020, Gaudium Press) Cumpliendo con las determinaciones del decreto de Gobierno del Distrito Federal, la Arquidiócesis de Brasilia decretó, hasta el día 05 de abril de 2020, «la suspensión de todas las misas presenciales y demás celebraciones litúrgicas».
En el documento, publicado en el website de la Arquidiócesis, se resalta que el decreto gubernamental no implica en el cierre de los templos católicos y que los mismos permanecerán abiertos para que los fieles puedan hacer sus oraciones. Entretanto, se recomienda que se eviten aglomeraciones.
Confesiones ‘Drive-in’
«En tiempos de crisis, las personas tienen necesidad aún mayor de asistencia espiritual», por este motivo, el texto recomienda que «los sacerdotes estén disponibles para la atención personal de los fieles, tomando las medidas de prevención que han sido divulgadas para preservar la propia salud y de aquellos que buscan la ayuda de la Iglesia».
Siguiendo las orientaciones de la Arquidiócesis, la Parroquia Nuestra Señora de la Salud, localizada en la cuadra 702 norte, está utilizando un sistema estilo «drive-in» para administrar el sacramento de la penitencia. Iniciativa semejante ya ocurre en los Estados Unidos (click aquí para leer noticia anterior).
Los fieles son atendidos en el estacionamiento de la parroquia. Desde la ventana de sus vehículos, sin la necesidad de descender de los mismos, los penitentes pueden confesar sus pecados, siempre individualmente. El sacerdote, teniendo a su lado una mesa con alcohol en gel, permanece alejado, a una distancia segura, absolviendo cada uno de los penitentes arrepentidos.
Según la Parroquia, el esquema de confesiones, iniciado el último sábado, 21 de marzo, ha tenido una buena adhesión por parte de los fieles. Solamente en el primer día, en apenas dos horas, más de 40 vehículos pasaron por el lugar. Las confesiones por el drive-in ocurren de martes a viernes, de 16:30 a 18:30 horas, y los sábados, de 16:00 a 19:00 horas.
Según el Padre Rafael Souza dos Santos, el objetivo es confortar el espíritu de los fieles, sobre todo en este período de pandemia.
«Respetamos la distancia, pues (los fieles) se quedan a más de tres metros de distancia. Los otros autos también están lejos, así se resguarda el sigilo de la confesión. Nuestra idea es celebrar ese sacramento», afirmó en entrevista a UOL.
«Vamos a continuar nuestro trabajo. Muchos fieles manifiestan gratitud y emoción con esa nueva medida. Para nosotros católicos, el sacramento de la confesión perdona todos los pecados. Consecuentemente, el espíritu queda en paz y preparado para soportar lo que estamos pasando o lo que todavía ha de venir», concluyó. (EPC)
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