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Washington (Jueves, 26-03-2020, Gaudium Press) La Conferencia de Obispos Católicos de Estados Unidos (USSCB), a través del Presidente de su Comité de Actividades Provida, Mons. Joseph F. Naumann, conmemoró el pasado 25 de marzo los 25 años de la Encíclica Evangelium Vitae de San Juan Pablo II, de carácter fundamental para la lucha en favor del respeto a la vida en la Iglesia Católica.
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| San Juan Pablo II consolidó su enseñanza sobre la sacralidad de la vida humana en Evangelium Vitae. Foto: Pontificio Consejo para la Familia. |
«Al celebrar la solemnidad de la Anunciación del Señor el 25 de marzo, también conmemoramos el 25 aniversario de la Encíclica profética del Papa San Juan Pablo II, El Evangelio de la Vida (Evangelium vitae)», expresó Mons. Naumann en su comunicado oficial. «Aquí, este Santo nos ofrece un desafío claro: ‘Con gran apertura y coraje, necesitamos cuestionarnos cuán extendida está la cultura de la vida hoy entre cristianos individuales, familias, grupos y comunidades en nuestras diócesis. Con igual claridad y determinación debemos identificar los pasos que estamos llamados a tomar para servir a la vida en toda su verdad».
Como uno de estos pasos que los creyentes deben tomar para hacer realidad la Cultura de la Vida, el Arzobispo de Kansas invió a los fieles a «preguntarnos cómo estamos ayudando a las mujeres necesitadas que están embarazadas o tienen hijos pequeños». Para el prelado, el aniversario de la Encíclica «nos desafía a abrir aún más nuestros corazones y a mejorar nuestras respuestas donde sea necesario, especialmente a nivel local, en resumen, a realmente acompañar a cada mujer embarazada o en edad de crianza que lo necesite».
Mons. Naumann destacó el esfuerzo de los Obispos estadounidenses en su programa «Caminando con mamás necesitadas: un año de servicio» en el cual se invita a las comunidades locales a evaluar y aumentar sus formas de ayuda a las madres en situaciones difíciles desde el 25 de marzo de 2020 hasta la misma fecha en 2021. Si bien los eventos programados se ven pospuestos por la actual situación de salud pública, «aún podemos rezar (…) para que este año de servicio nos ayude a aumentar nuestro alcance, para que cada madre embarazada y en edad de crianza que lo necesite pueda saber que puede recurrir a su comunidad católica local para obtener ayuda y amistad auténticas».
Con información de USCCB.
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