Xining City (Miércoles, 15-04-2020, Gaudium Press) El gobierno chino continúa su guerra contra la religión, incluso en Pascua.
Según informa International Christian Concern, esta vez fue la demolición de un lugar de culto -la iglesia Donghu- en la provincia de Qinghai, ocurrida el pasado domingo 12 de abril.
Desde 2017 se había intentado clausurar la Donghu Church
Desde las 8:30 de la mañana, y por espacio de dos horas, un equipo de demolición de la Oficina de Construcción del Distrito Urbano y Rural Chengxi de la Ciudad de Xining se encargó de ejecutar la operación, diciendo que esa construcción era ilegal y alegando «preocupaciones de seguridad».
Tenía aprobación estatal
La operación de demolición de la ‘Donghu Church’ alerta que ni siquiera las iglesias cristianas con aprobación estatal se ven libres de la persecución desatada por las autoridades estatales contra la religión. Efectivamente, Donghu Church, que tenía una existencia de 20 años y está compuesta por 300 miembros, había recibido la aprobación oficial desde el año 2003. Era la congregación religiosa más antigua del distrito de Chengxi.
Varias veces se quiso clausurar Donghu Church.
En diciembre de 2017, el departamento de bomberos quiso cerrarla alegando ‘preocupaciones de seguridad’, pero tras la protesta de docenas de miembros de esa comunidad, la orden fue suspendida.
Después de la suspensión, la comunidad compró una nueva sala para su culto, pero cuando quiso trasladarse ahí, la oficina estatal religiosa negó la autorización, exigió que se vendiera esa propiedad y dijo que se comprase otra en cualquier lugar.
Efectivamente, el año pasado escogieron otra locación, pero también le fue negada la autorización. En diciembre del año pasado, el departamento de bomberos alegó que el lugar de culto no había cumplido los requerimientos de seguridad, y por ello le fue cortada la electricidad. La comunidad realizó su culto en la oscuridad durante dos semanas. Entonces les fue comunicado que debían detener inmediatamente el culto, y que la construcción sería demolida en el 2020, lo que efectivamente se realizó el día de Pascua.
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