Madrid (Lunes, 20-04-2020, Gaudium Press) Con el objeto de dar mayor visibilización sobre la llamada vocacional y de sensibilizar a la sociedad sobre la importancia de orar y apoyar económicamente a quienes optan por la vida sacerdotal y consagrada, la Iglesia en España celebrará el 3 de mayo la Jornada Mundial de Oración por las Vocaciones y Vocaciones Nativas.
El evento, que llevará por lema «Jesús vive y te quiere vivo» y ocurre en el cuarto domingo de Pascua, es organizado por la Comisión Episcopal del Clero y Seminarios de las Conferencia Episcopal Española (CEE), en unión con la Conferencia Española de Religiosos (CONFER), las Obras MIsionales Pontificias (OMP) y la Conferencia Española de Institutos Seculares (CEDIS).
Foto: CEE |
Para una mayor vivencia de la Jornada, desde la CEE ha preparado una serie de subsidios que se pueden descargar en la web del Episcopado Español, que incluye el mensaje del Papa Francisco para este día, un guía para la celebración de una Semana Vocacional, un Subsidio Litúrgico con Vigilia de Oración, catequesis para niños, jóvenes y adultos, además de la estampa de oración y el cartel en español, gallego, euskera y catalán.
La Iglesia al servicio de las vocaciones
Y es que la jornada busca generar mayor conciencia entre los miembros de la Iglesia sobre la importancia de servir a las vocaciones. El propio Papa Francisco, en el mensaje que ha dirigido con motivo de la Jornada Mundial de las Vocaciones, ha hecho un llamado a la Iglesia en este sentido. En el documento escribe:
«Particularmente en esta Jornada, como también en la acción pastoral ordinaria de nuestras comunidades, deseo que la Iglesia recorra este camino al ser vicio de las vocaciones abriendo brechas en el corazón de los fieles, para que cada uno pueda descubrir con gratitud la llamada de Dios en su vida, encontrar la valentía de decirle ‘sí’, vencer la fatiga con la fe en Cristo y, finalmente, ofrecer la propia vida como un cántico de alabanza a Dios, a los hermanos y al mundo entero».
Oración de un joven ante el llamado vocacional
Cristo, tú que eres eternamente joven y haces nuevo todo lo que tocas, lléname de tu vida.
Ayúdame a reconocer para qué estoy hecho, qué sentido tiene mi paso por esta tierra, cuál es tu proyecto para mí.
Condúceme al encuentro con los demás, a la misión sin fronteras ni límites, y hazme caminar contigo hacia un horizonte siempre nuevo.
Enséñame a mostrar la belleza de la generosidad y del servicio, de la fidelidad a la propia vocación y del amor a los pobres, para que todos sientan el calor de tu misericordia.
Tú, el Amigo, el eterno viviente, que viniste para darme vida, y vida en abundancia, hazme Vivir. Amén.
Con información de Conferencia Episcopal Española.
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