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Asunción (Martes, 24-11-2009, Gaudium Press) Terminar con la violencia y con el tráfico de personas, solicitó la reunión de fin de año de la Coordinación Nacional de la Pastoral Social, un organismo de la Conferencia Episcopal Paraguaya, fiel a su misión evangelizadora, a su tarea de promoción y asistencia a las personas, organizaciones y comunidades, acompañando al pueblo en su caminar hacia el desarrollo integral.
«La violencia engendra violencia», por ello condenamos todo tipo de atropello a la dignidad de la persona -afirma un comunicado de la entidad-. En unión con nuestros obispos pedimos a los secuestradores de Fidel Zavala terminen con la filosofía de la violencia y el tráfico con la vida y la libertad ajena, para dar paso a las obras de Dios que nos identifican como verdaderos cristianos. Nadie debe destruir a la persona por ningún motivo «Vine para que tengan vida, y la tengan en abundancia» (Jn 10, 10).»
«Exhortamos a la clase política nacional a privilegiar la promoción y concreción del bien común, por encima de los intereses sectarios e individuales, en este momento histórico que vive la República.»
«Llamamos a las autoridades nacionales a extremar todas las instancias de diálogo, para fortalecer la democracia y encontrar caminos de solución a las grandes necesidades del sector mayoritariamente pobre de nuestro país.»
«Como miembros de la Iglesia, nos comprometemos a seguir aportando nuestros esfuerzos y oraciones por un país justo, fraterno, solidario y abierto a Dios, donde reine la paz y la esperanza en un porvenir mejor. Invocamos la bendición de Dios, por intercesión de nuestra madre común la Virgen de Caacupé, sobre todas las personas que habitan en este país», expresan los agentes de pastoral social.
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