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Santiago del Estero (Martes, 24-11-2009, Gaudium Press) Una multitud estimada en 40 mil personas participó, el pasado sábado 21, en la celebración eucarística de la coronación pontificia de la imagen de Nuestra Señora de la Consolación de Sumampa, en la provincia de Santiago del Estero, Argentina. El encuentro ocurrió en el santuario Histórico Nacional, localizado a cinco kilómetros de la ciudad de Sumampa.
La eucaristía fue presidida por el nuncio apostólico en el país, Mons. Adriano Bernardini, y concelebrada por el obispo de Santiago del Estero, Mons. Francisco Polti y el obispo auxiliar, Mons. Ariel Torrado Mosconi. También estaban presentes en la ceremonia el gobernador de Santiago del Estero, Gerardo Zamora, y el prefecto local, Luis Antonio Galván, entre otras autoridades.
Después de la bendición de las dos coronas, que fueron hechas con material donado por la comunidad sumampeña, fue coronado el hijo y, en seguida, a la Virgen ante una multitud que saludó con paños y banderas erguidas aquel momento histórico.
Una vez coronadas las dos imágenes, los devotos cantaron una serenata en homenaje a la Virgen y marcharon, iluminando el camino con antorchas y lanzando pétalos de rosa hasta llegar a un altar donde la imagen permaneció hasta ayer, fecha de la fiesta de la patrona y de la procesión.
En su homilía, Mons. Bernardini resaltó la humildad de María, que «es simplemente una mujer que se confunde con todas las otras mujeres, una madre que no se distingue entre las otras madres. Jamás se coloca en primer plano, no tiene ninguna pretensión de atraer la atención para sí. Ella desaparece totalmente y felizmente en el Hijo», afirmó.
El nuncio apostólico en Argentina lamentó, también, el hecho de que, hoy, «Dios se torna superfluo», actitud que, advirtió él, «puede ayudar a acumular dinero, combinando negocios ventajosos, haciendo carrera, teniendo éxito, pero es un obstáculo para sus mandamientos».
La importancia del evento
La corona colocada a la Virgen fue bendecida por el Papa Benedicto XVI, en el marco de la visita «Ad Limina» que los obispos de Santiago del Estero, Mons. Francisco Polti, y el auxiliar, Mons. Ariel Torrado Mosconi, hicieron en mayo de 2007.
Cuando la noticia de la decisión del Papa de conceder la coronación papal a la imagen mariana fue anunciada, el obispo de Santiago afirmó que «con este don se cumple un querido y adorado deseo de generaciones de personas de la provincia de ver coronada a la Virgen de la Consolación de Sumampa que, desde 1630, fijó su morada en tierras santiagueñas.
La imagen de Nuestra Señora de la Consolación es una de las dos enviadas por Brasil desde el siglo XVII al propietario Farias de Saa, que vivía en el área Sumampa. La otra imagen es la que estaba en Luján, donde la tradición dice que la Virgen religiosa «quería quedarse».
Por esta coincidencia religiosa, el arzobispo emérito de Mercedes-Luján, Mons. Ruben Di Monte, trajo al santuario una réplica exacta de la Virgen de Luján, para compartir con la Virgen de Sumampa, «dado que la historia se une con muchas características en común».
Virgen de Sumampa
En circunstancias interpretadas como «milagrosas», la imagen brasileña Sumampa llegó en 1630 a Sumampa en una mula que se había desprendido de la caravana de la cual formaba parte en Córdoba.
Desde 1984, la Virgen de Sumampa es la patrona de la provincia de Santiago del Estero. Es también protectora de los estancieros, de las escuelas y de los cadetes de la policía.
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