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Bogotá (Miércoles, 30-12-2009, Gaudium Press) Por esta época de fin de año Bogotá, la capital colombiana, recibe miles de visitantes provenientes de Colombia y de diferentes partes del mundo. Uno de los principales atractivos que tiene la ciudad son sus centros religiosos que, además de su historia y de su arquitectura, atraen a miles de fieles que quieren ofrecer una oración en acción de gracias por el año que termina y encomendarle a Dios el año que comienza. Gaudium Press presenta para sus lectores un recorrido por los santuarios e iglesias más representativas de la ciudad y sus alrededores.
Santuario del Divino Niño del 20 de Julio
Ubicado en el sur de Bogotá, es uno de los templos que mayor número de fieles recibe la capital colombiana, esto gracias a la devoción al Divino Niño, cuya imagen fue llevada inicialmente -en el año 1935- a unos terrenos deshabitados y pobres del Barrio 20 de julio, por parte del sacerdote salesiano Juan del Rizzo.
Más adelante, en 1942, la imagen del Divino infante fue colocada en un lugar especial en la nueva iglesia -hoy santuario-, la cual fue construida gracias a la convocatoria que, en su momento, hizo el sacerdote salesiano. Desde allí el Padre Rizzo propagó la devoción a Jesús infante, siendo muchos los milagros que se le atribuyen.
Santuario de Monserrate
Este santuario -que fue fundado en el siglo XVII y reformado en 1925- se encuentra a unos 3.210 sobre el nivel del mar, en uno de los cerros más altos que bordean a Bogotá. La iglesia, además del cerro, recibe el nombre de Monserrate, gracias a la imagen española de la Virgen de Monserrat, para quien -inicialmente-, fue construida una hermita con la autorización del español Juan de Borja, devoto de la imagen de la Morenita, como es conocida la Virgen de Monserrat.
En este Santuario es venerada la imagen del Señor Caído -esculpida por el maestro Pedro de Lugo y Albarracín en el siglo XVII-, a quien acuden miles de devotos al año, quienes suben al cerro, principalemente a pie, a pedir favores especiales o en agradecimiento por bendiciones recibidas.
Iglesia San Alfonso María de Ligorio
También conocida como la Iglesia del Señor de los Milagros, está ubicada en el Barrio La Soledad de la capital colombiana. Cada día 14 de todos los meses, la Iglesia recibe una multitud de feligreses que llegan a venerar al Señor de los Milagros, cuya imagen original se encuentra en la ciudad de Buga, Colombia.
La imagen que se venera en Bogotá fue elaborada en la ciudad de Medellín. El templo de San Alfonso María de Ligorio también tiene en su interior varias muestras de arte religioso del siglo XVII.
Catedral de Sal de Zipaquirá
Catalogada como la «Primera Maravilla de Colombia; un encuentro de lo religioso y lo humano bajo tierra», la Catedral de Sal es una ingeniosa construcción desarrollada en una antigua mina de sal.
La maravilla arquitectónica -que se localiza en el municipio de Zipaquirá, Colombia, a 45 minutos de Bogotá, unos 50 kilómetros aproximadamente- consta de un templo de alrededor de 8.500 metros cuadrados bajo tierra, una gigantesca cruz esculpida en la nave central y un Via crucis, el cual se puede realizar mientras se desciende hacia la Catedral.
Santuario de Nuestra Señora de la Salud de Bojacá
Localizado a 70 minutos de la capital de Colombia, en la parroquia de San Lorenzo Mártir del municipio de Bojacá. La iglesia es conocida como Santuario de Nuestra Señora de la Salud porque en su interior se encuentra el milagroso cuadro de la Virgen de la Salud -también conocida como Nuestra Señora de los Dolores o Virgen de las Angustias-, que fue traido en el siglo XVIII, desde la ciudad de Granada, España, por el español José Perez.
A la venerada imagen de María se le atribuyen diversos milagros concedidos a devotos que la han visitado, especialemnte la conversión de personas que durante varios años estuvieron alejadas de Dios, y, de manera especial, a quienes acuden con fe pidiendo por su salud.
Gaudium Press / Sonia Trujillo
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