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Ciudad del Vaticano (Jueves, 25-03-2010, Gaudium Press) Profundización de los temas que abordan la «formación humana, intelectual, espiritual y pastoral de los seminaristas y de las personas consagradas y la formación permanente de los sacerdotes, con una particular atención a su espiritualidad». También la necesidad de promoción de la «unidad interna de la Iglesia Católica en China» y el deseo de un «diálogo respetuoso y abierto entre la Santa Sede y las autoridades gubernamentales».
Estos fueron los puntos definidos como más sensibles y que necesitan ser enfrentados por los representantes de la Iglesia en China, según las conclusiones establecidas por los participantes de la 3ª reunión de la Comisión sobre la Iglesia Católica en China, que terminó ayer en el Vaticano después de tres días de discusiones.
La Sala de Prensa de la Santa Sede divulgó hoy un texto con el resultado de las reflexiones hechas por los integrantes de la Comisión, creada en 2007 por el propio Papa Benedicto XVI, durante estos tres días.
Además de los puntos resaltados, el texto destaca también que los obispos son los responsables por la obra formativa y la fraterna colaboración de la Iglesia Católica en China. La Comisión recuerda que «la verdadera formación cristiana consiste, antes que nada, en ‘conocer a Cristo, la potencia de su Resurrección, la comunión con sus sufrimientos’ «.
Los participantes de la reunión confirmaron la necesidad de «una auténtica comunión eclesial» que implica «un esfuerzo personal de búsqueda de la verdad y de reconciliación», destaca el comunicado. Los obispos son todos invitados a empeñarse «a favorecer el crecimiento de la unidad de fe y la vida de todos los católicos» junto al Papa.
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