Los niños y niñas de Cali, Colombia, vivirán la "Gran Marcha de la Alegría"

Cali (Viernes, 23-04-2010, Gaudium Press) Una de las poblaciones más vulnerables del país son los niños y las niñas, quienes a diario se enfrentan a problemas como la deserción escolar, el trabajo forzado, abusos, desplazamiento, entre otros, que impiden que muchos pequeños vivan una infancia feliz y segura.

Sin embargo, son muchas las organizaciones y fundaciones que trabajan en pro del bienestar y desarrollo integral de los niños en el país. Ejemplo de ello es la Fundación Cyriel De Pauw, la cual este fin de semana llevará a cabo la «Gran Marcha de la Alegría» en la ciudad de Cali. Gaudium Press diálogo con ellos para conocer más de cerca su labor y esta importante iniciativa.

Una fundación a favor de los niños y niñas

En la época navideña del año de 1972, el sacerdote asuncionista Cyriel De Pauw junto con algunos jóvenes, convocaron a niños y niñas del barrio San Nicolás, en la ciudad de Cali, a reunirse con el propósito a aprender villancicos propios de la fecha.

«En aquél momento no alcanzaban a imaginar que ésta sería la semilla que posteriormente tomaría fuerza dentro del barrio, para dar vida a lo que durante más de 30 años se llamó «Cruzada de la Amistad». Sólo hasta el año 2004, la ‘Cruzada’ se convirtió en una entidad jurídica, utilizando el nombre de su fundador», expresó Mónica Cardona, Coordinadora de Programas en la Fundación Cyriel De Pauw.

Actualmente la Fundación bajo el programa «Cruzada de la Amistad» trabaja con los niños y niñas en dos actividades. En la primera, «Tiempo para Niños», la herramienta principal es el juego. De este modo, los pequeños entre los 3 y 7 años de edad encuentran la posibilidad de interactuar en un espacio «sano y propicio para que puedan disfrutar de su infancia (…) usando el juego como apoyo al proceso de inserción a la vida escolar, la construcción de lazos de amistad y relaciones sociales, así como la adquisición de hábitos saludables», agrega Cardona.

La segunda, «Unidos por la Amistad», está dirigida a niños y niñas entre los 8 y 12 años. Este grupo se reúne semanalmente para trabajar en torno a proyectos enfocados en valores, el papel de los niños en el mundo, y de manera importante en «Jesús como amigo, como guía y como centro de vida», informó la Coordinadora de Programas

Así, «cientos de personas que han crecido en los barrios de la zona centro de la ciudad de Cali, han pasado por la Cruzada y han tenido la posibilidad de aprender desde el mensaje evangélico, a relacionarse entre sí y ‘vivenciar’ el amor al prójimo a través del servicio (…). También, a nivel del trabajo con los niños y jóvenes, nuestro reto permanente es poder impactar sus vidas y las de sus familias de manera positiva, transformando realidades y generando en cada uno de ellos el espíritu de servicio», manifestó Mónica Cardona.

Marchando juntos por los niños

Para el próximo 25 de abril, la Fundación Cyriel De Pauw tiene preparada la «Gran Marcha de la Alegría», ocasión para que los niños y niñas de la ciudad de Cali expresen lo que viven, lo que piensan y lo que sienten.

«La Gran Marcha de la Alegría, surge de nuestro interés por recuperar el verdadero sentido de la celebración del Día de la Niñez. Así, como por el deseo de que nuestros niños y niñas comiencen a transformar, también, su idea de esta fiesta y más bien se ocupen de conocer sus derechos; así como de expresar todo aquello que les preocupa y que quieren cambiar. Queremos que los niños trabajen desde su condición infantil por la transformación de la sociedad, por la construcción de un mundo mejor», expresó Cardona.

La marcha tendrá lugar alrededor del parque San Nicolás a las 10:00 am, hora local. Luego se celebrará una sentida Eucaristía en la Parroquia San Nicolás en donde los participantes podrán orar por todos los niños y niñas del país y del mundo.

Se espera «que asistan muchos niños y niñas con sus familias. Que se genere la pregunta: ¿por qué estamos marchando? y que se genere la respuesta: porque los niños y niñas merecen un mundo mejor, porque la humanidad debe a los niños lo mejor que tiene para ofrecer, porque en Colombia se siguen vulnerando los derechos de nuestros pequeños, porque es necesario que los niños alcen su voz y se expresen, porque los adultos tenemos que tenerlos en cuenta, pero con acciones reales, con preocupaciones verídicas, con verdadero respeto y amor. La marcha es un ‘llamado’ a la conciencia de los adultos, del mundo y de los niños también», expresó para Gaudium Press Mónica Cardona.

Esta Fundación hace un llamado a reconocer la importancia de la presencia de la población infantil en el país, no sólo porque son el futuro del mismo, sino porque ellos ya hacen parte de la sociedad, la cual les debe respeto, amor y protección. Por ello ha postulado como sus principales objetivos el «brindar alternativas de vida diferentes a una población que vive situaciones económicas difíciles, que les impide acceder a estudios complementarios o actividades artísticas, previniendo así la vinculación a la delincuencia, al consumo de sustancias psicoactivas, a la prostitución, a la mendicidad y/o vinculación a grupos al margen de la ley. Así, como cultivar un espíritu crítico que permita construir un espacio para la sana convivencia y el desarrollo de habilidades para la vida presentando a Jesús como el centro de la vida, como guía que orienta nuestro caminar», informó Mónica Cardona.

Finalmente, «en Cali, Colombia, y en todas partes del mundo son miles y miles los niños y niñas que necesitan ser apoyados. La pobreza, y en muchos otros casos la ‘miseria’, golpea fuertemente a nuestros niños. Así que la Fundación trabaja con los niños en Cali, como muchos otros lo hacen con niños en todas partes del mundo (…). Nosotros creemos en la ‘igualdad’ y creemos que el ‘amor’ debe traducirse en acciones concretas y reales. Por eso brindamos a nuestros niños el mayor número de oportunidades posibles para que ocupen su tiempo libre, para que crezcan felices, para que se formen bajo los mandatos de Jesús y puedan ser seres humanos comprometidos y dispuestos a participar de la transformación de la sociedad; para que puedan ser constructores de un mundo mejor», expresó la Coordinadora de Programas de la Fundación Cyriel De Pauw.

Gaudium Press / Nathali J. Rátiva M