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Cuernavaca (Viernes, 23-04-2010, Gaudium Press) Cuando Héctor Mojica Romero, un joven mexicano de 27 años que vive en la pequeña ciudad de Cuernavaca, al sur de la capital mexicana, tuvo la idea de crear un grupo en Facebook que bautizó «Yo tengo un amigo sacerdote que es genial aunque los medios digan que no», nunca imaginó que en poco más de un mes se unirían cerca de 20.000 seguidores.
Esta iniciativa nació una noche en la que Mojica, luego de ver los noticieros donde criticaban a algunos sacerdotes por casos de pederastia y de pensar que así no son los sacerdotes que él conoce, tuvo la ocurrencia de tomar su computador y crear un grupo que inicialmente estuvo pensado para sus amigos en México.
Pero como el mismo señaló «la respuesta fue impresionante», y en poco tiempo empezaron a agregarse personas de Puerto Rico, Colombia, Costa Rica, Ecuador, Chile, Uruguay, Paraguay, Venezuela, Italia, Canadá, Croacia, Filipinas y España, entre otros, donde la mayoría son jóvenes. «Si algo tenemos los jóvenes es que a nosotros no se nos engaña fácilmente y en esto nosotros nos damos cuenta de la verdad, por eso el grupo ha tenido tanto éxito», agregó Mojica en una entrevista que concedió al noticiero CNN en español.
De otro lado, para Mojica no hay otra explicación sino que fue el mismo Dios quien lo motivó a crear este espacio en la red social, pues nunca se le había ocurrido la idea de abrir un grupo en facebook ni en otra sitio en internet; «En verdad Dios se hace cargo de dejarte con la boca abierta, o de jugarte bromas tan bonitas como éstas, pero todo está planeado y no existen coincidencias», comentó.
Un espacio para dar a conocer a los sacerdotes que son «amigos geniales»
El grupo -que en la últimas semanas ha empezado a recibir en promedio 2000 seguidores diarios- es hoy un espacio para «mostrar la verdad del sacerdocio cristiano católico», que es «una vocación maravillosa», como cita la información del grupo, donde sus seguidores cuentan el testimonio de un sacerdote amigo, o simplemente conocido, que ha sido importante para sus vidas y que es ejemplo de lo que es una verdadera vocación sacerdotal.
Quienes se adhieren al grupo, «suben sus fotos y hermosos testimonios de sacerdotes que han entregado su vida, nos platican de esos «amigos geniales» y de cómo los han ayudado, silenciosos héroes anónimos, grandes misioneros, devotos celebrantes y fieles amigos de Dios, aún en las batallas más difíciles», agregó el joven mexicano.
Gaudium Press / Sonia Trujillo
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