Osorno (Lunes, 24-05-2010, Gaudium Press) En la diócesis de Osorno, sur de Chile, cientos de fieles se congregaron en el Gimnasio Monumental «María Gallardo» para festejar la visita de la Virgen del Carmen Misionera, preciosa imagen regalada por el Papa que junto al ‘Evangelio de Chile’ están recorriendo todo el país. La actividad se realizó la tarde del viernes 21 y en ella participaron las parroquias, comunidades y movimientos apostólicos del Obispado.
El encuentro eclesial estuvo marcado por la destacada participación de los jóvenes, quienes por medio de cantos, exposiciones y coreografías resaltaron el lema pastoral de este año «Chile una Mesa para Todos» y representaron los desafíos que enfrenta la patria en el marco del Bicentenario.
A eso de las 16:00 hrs. se dio inicio a la Eucaristía que fue presidida por el Obispo de Osorno, monseñor René Rebolledo y concelebrada por todos los sacerdotes de la diócesis. La liturgia contó con la presencia de las autoridades civiles y militares de la provincia, como también del fervor de cientos de fieles que repletaron el gimnasio.
Minutos emotivos se vivieron al momento en que la Santísima Virgen ingresó solemnemente al altar siendo aplaudida y vitoreada efusivamente por los laicos presentes. Del mismo modo fue recibido el Evangelio de Chile, que iba acompañado por 80 jóvenes que portaban cirios y banderas.
Discípulos misioneros de Jesús, como María: reto y desafío de la diócesis de Osorno
En su mensaje Mons. Rebolledo destacó el compromiso de la provincia con el anuncio del Evangelio. «El `Sí´ de María a Dios Padre ha definido de una vez y para siempre su vida y la vida de la Iglesia. Está encausando, por cierto, también nuestras vidas. Nosotros en esta tarde reiteramos nuestra gratitud profunda a nuestra Madre y queremos asegurarle que, como Ella, nos prodigaremos con generosidad para que su Hijo sea conocido, amado y seguido en Osorno», señaló.
Y agregó: «Esta es la voluntad de Dios. Así lo hemos escuchado de la segunda lectura: ‘Él quiere que todos se salven y lleguen al conocimiento de la verdad’ (1Tim 2,4). No escatimaremos sacrificios; con su ayuda procuraremos vencer las dificultades e inconvenientes que pudieran aparecer en el camino. El ángel del Señor nos dice también a nosotros: `no hay nada imposible para Dios´ (Lc 1, 37). Discípulos misioneros de Jesús, como María, este es el reto y el desafío de nuestra amada diócesis de Osorno».
Al finalizar, monseñor Rebolledo añadió «María, comprometida con la misión de su Hijo es nuestro ejemplo y fiel compañía. En palabras del Papa Benedicto XVI, que nos preside en el camino de la fe: `Es la flor más bella surgida de la creación, la rosa aparecida en la plenitud del tiempo, cuando Dios, mandando a su Hijo, entregó al mundo una nueva primavera´».
Gaudium Press / Igor Roco
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