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Buenos Aires (Miércoles, 14-07-2010, Gaudium Press) En una concentración inédita en la historia argentina, más de 200.000 personas se dieron cita ayer ante la sede del Congreso de ese país para manifestar su rechazo al proyecto de ley que busca la legalización del «matrimonio» homosexual y la adopción de niños por parte de parejas homosexuales, y en apoyo a la familia y al matrimonio.
En el día de hoy, el Senado argentino estudiará el proyecto de ley que reforma el Código Civil, tras su aprobación en la Cámara Baja.
La concentración, iniciada a las 18:30 horas locales, fue convocada por el Departamento de Laicos de la Conferencia Episcopal Argentina (DEPLAI) y agrupaciones de otros credos y de la sociedad civil. Hubo números artísticos y proyección de videos, y fue leído un mensaje del Cardenal primado de la Argentina, Jorge Mario Bergoglio -en apoyo de la manifestación- así como el «Manifiesto por el Matrimonio y el Derecho Prioritario de los Niños». El manifiest está firmado por Gastón Bruno, en representación de la Alianza Cristiana Evangélica de la Republica Argentina (ACIERA) y de la Federación Confraternidad Evangélica Pentecostal (FECEP), y por Justo Carbajales, en representación del DEPLAI.
Manifiesto por el Matrimonio y el Derecho Prioritario de los Niños
«Hoy estamos reunidos en esta Plaza del Congreso para manifestar ante todo el país nuestra convicción y nuestro reclamo»: así inicia el Manifiesto, que fue leído a viva voz por los firmantes delante de las miles de personas congregadas.
«Nuestra convicción que el matrimonio es una institución esencial para nuestra sociedad, que constituye la estructura básica sobre la que ésta se constituye. Por lo tanto, es responsabilidad fundamental de nuestros representantes políticos protegerla e impulsarla; preservarla legalmente tal como es, la unión entre una mujer y un hombre en orden a la ayuda mutua, a la procreación, a la realización y felicidad de los que lo componen, al goce de la vida en su plenitud y la educación de los hijos.»
Es una diferencia natural y no hay discriminación en reconocerla
«Somos seres sexuados, genéticamente determinados como mujeres y varones y biológicamente para procrearnos necesitamos de la unión de un gameto masculino y uno femenino. Ningún movimiento cultural puede desconocer esta verdad esencial. Desde esta evidencia de diferencia y complementariedad, es natural llamar al «varón», varón y a la «mujer», mujer y no resulta discriminatorio que las mujeres tengan beneficios sociales y laborales por el embarazo y los hombres no. También corresponde decir que la institución matrimonial está fundada en la unión entre varón y mujer, (como lo señala toda la legislación nacional preexistente) y que las uniones homosexuales son diferentes en su constitución y por lo tanto no son matrimonio», continúa el manifiesto.
El comunicado resalta «el derecho prioritario de las niñas y niños a tener mamá y papá. La diferencia sexual de los progenitores no es una cuestión arbitraria de la ley. En ella se posa nada menos que la estructura psíquica de los chicos; la aceptación del padre, la separación de la madre y en consecuencia la posibilidad de entender al otro».
«Se ha hecho oir la ‘mayoría silenciosa’ «
Con relación a las declaraciones recogidas durante el último mes, en el que la Comisión General del Senado argentino «federalizó la discusión» sobre el proyecto de ley y escuchó a los ciudadanos de las provincias, el manifiesto expresa que «se ha hecho oír la ‘mayoría silenciosa’ y que «esta voz debe ser escuchada y respetada por nuestros representantes políticos». «Cientos de expertos han explicado en las Audiencias los sustentos científicos, filosóficos, psicológicos y jurídicos que sustentan lo que decimos. (…) El resultado ha sido abrumador a favor de preservar la institución matrimonial», sostiene el comunicado.
Sobre las repercusiones políticas que pueda tener la actitud de los senadores en el debate de hoy, el manifiesto leído afirma que «apoyaremos con nuestro voto a aquellos políticos que protejan el matrimonio entre varón y mujer y rechacen el proyecto de ley de matrimonio de personas del mismo sexo y trabajaremos para que la mayor cantidad de ciudadanos de todas las provincias también lo haga». Asimismo se expresa que «no votaremos más a aquellos políticos que voten por el matrimonio homosexual o se abstengan o se ausenten de la votación y trabajaremos para que la mayor cantidad de ciudadanos de todas las provincias también lo haga».
«Tenemos que defender la familia, es el orden natural -declaró uno de los manifestantes de anoche al diario Clarín. Por tanto hay que defender estos valores que tienen que ver con la esencia de la persona. Así que esto no es un acto contra nadie sino a favor de la vida, de la familia y de todos los argentinos.»
De cómo el sentimiento patriótico estuvo siempre presente en la manifestación, da cuenta el ingreso a la plaza de una bandera nacional de 200 metros, bajo los gritos de «¡Argentina, Argentina!», en uno de los momentos auge de la convocatoria.
Gaudium Press / S. C.
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