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Bogotá (Lunes, 26-07-2010, Gaudium Press) En el marco de una reunión convocada en Bogotá por el Consejo Episcopal Latinoamericano (CELAM) -en el que los presidentes de las conferencias episcopales de Latinoamérica participaron para definir la forma en que se va a ayudar, desde la Iglesia Católica, con los procesos de reconstrucción de Haití – el presidente de la Conferencia Episcopal de Colombia (CEC) y nuevo Arzobispo de Bogotá, Mons. Rubén Salazar Gómez, así como el presidente de la Conferencia Episcopal de Venezuela (CEV) y Arzobispo de Maracaibo, Mons. Ubaldo Santana Sequera, expresaron su deseo en contribuir a mejorar las relaciones entre los dos países, luego de que, el pasado jueves, el presidente venezolano, Hugo Chávez, rompiera relaciones con Colombia.
Sobre esta ruptura de relaciones, en una nota de prensa -que fue publicada por el Departamento de Comunicaciones de la CEC-, Mons. Salazar señala que «no tiene sentido que no seamos capaces de solucionar los problemas (…) nuestros pueblos merecen vivir en paz», e insistió que es necesario buscar los mecanismos que ayuden a superar el «clima de desconfianza mutua» entre los gobiernos de las dos naciones.
Igualmente, en entrevista para la emisora mariana Radio María, el prelado recordó que Colombia y Venezuela son naciones hermanas, e invitó a que los dos gobiernos «hagan un esfuerzo grande de acercamiento (…) para lograr una unidad verdadera».
Asimismo, en la nota de prensa de la CEC, Mons. Salazar señaló que espera «volver a tener las relaciones de paz y fraternidad» entre los dos países, y pidió que, con estos hechos, se tenga en cuenta el sufrimiento de las personas afectadas, especialmente los pobres y familias, que viven del lado y lado de la frontera.
Por su parte, Mons. Santana Sequera -de acuerdo con la CEC-, dijo que, pese a la difícil situación de las naciones hermanas, espera que los episcopados de los dos países puedan seguir trabajando juntos «dando testimonio de fraternidad». También expresó su deseo de que «se aleje cualquier conflicto bélico entre las naciones», y recordó que es importante «buscar juntos caminos distintos a la guerra».
El Arzobispo de Maracaibo, en la misma nota de prensa, igualmente habló sobre la presencia de guerrilleros colombianos en Venezuela señalando que «hay demasiados testimonios de una circulación -de los insurgentes – por nuestra frontera», y añadió que «hace falta mayor presencia del Gobierno en las regiones fronterizas».
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