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Ciudad del Vaticano (Miércoles, 04-08-2010, Gaudium Press) Emocionado por el naufragio que dejó 140 víctimas fatales, el día 27 de julio, en el Río Kasai, en la República Democrática del Congo, el Papa Benedicto XVI envió un mensaje al nuncio apostólico en el país africano, Mons. Giovanni d’Agniello, donde expresa pesar a las familias de las víctimas.
En la misiva, firmada por el secretario de Estado del Vaticano, Cardenal Tarcisio Bertone, el Pontífice afirma que reza para que Dios consuele a todos los que están viviendo este momento de dolor y que acoja en la luz eterna a las víctimas de la tragedia. El Santo Padre desea también «a aquellos que perdieron personas queridas, que encuentren el apoyo y la asistencia necesarios para enfrentar esta dolorosa prueba». Y por último, invoca la bendición de Dios para todos los envueltos en el accidente.
Así como el Papa, la Conferencia Episcopal Nacional del Congo también envió un mensaje de pésame a los familiares de las víctimas del naufragio.
La tragedia en el Congo aconteció cuando un barco que transportaba pasajeros y mercaderías de la ciudad de Mushie para Kinshasa se hundió. Todo indica que el accidente haya ocurrido por exceso de peso.
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