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Montevideo (Jueves, 12-08-2010, Gaudium Press) La Conferencia Episcopal Uruguaya (CEU) inauguró, el pasado 3 de agosto, su nueva sede, localizada en la calle Bulevar Artigas, próxima a la Terminal de Tres Cruces y la estatua del Papa Juan Pablo II, en Montevideo, Uruguay. La nueva sede de la entidad presenta ahora una sala de videoconferencia que permitirá el contacto con más rapidez de la CEU con el Consejo Episcopal Latinoamericano (Celam) y con otros órganos episcopales. Informó Aica.
En la ceremonia de inauguración estuvieron presentes el Nuncio Apostólico en el país, Mons. Anselmo Pecorari, el Presidente de la CEU, Mons. Carlos Collazi, obispos y demás representantes del Episcopado uruguayo.
Invitado a discursar por el presidente de la CEU, el Nuncio Apostólico en Uruguay bendijo la nueva sede de la entidad con una oración inspirada en el salmo 126: «Que el Señor nos bendiga la casa / que el señor nos guarde la ciudad».
Mons. Pecorari destacó también la importancia del acontecimiento, explicando que «la casa de piedra es un símbolo de la realidad que hace referencia a ella: la Conferencia Episcopal». Y discurrió también sobre la importancia de la Conferencia Episcopal para la Iglesia de Uruguay, señalando que la entidad es un estímulo para vivir la comunión, la colaboración, la unidad, la solidaridad y, sobre todo, la caridad en el interior de la Iglesia que peregrina en un determinado país, «para el bien de toda la Iglesia y de toda la sociedad en la cual ella vive y actúa», afirmó.
Por último, expresó un sincero y profundo apoyo a la CEU y destacó que su presencia en la inauguración de la nueva sede supone un compromiso de colaborar con el episcopado uruguayo en la obra de evangelización misionera y en la difusión del bien en el país.
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