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Bogotá (Miércoles, 06-09-2010, Gaudium Press) Diversas investigaciones han revelado que los niños, desde muy temprana edad, buscan con ansia la experiencia religiosa, la cual, si se ayuda a vivir con elementos profundos y esenciales, permite que el infante experimente su relación con Dios y se prepare para su futuro seguimiento de Jesús. En respuesta a esa avidez espiritual de los menores, fue ideada la «Catequesis del Buen Pastor», como una propuesta de iniciación cristiana para niños a partir de los 2 años y medio de edad.
Esta catequesis, que nació en Roma en 1954 por iniciativa de Sofía Cavalleti, es promovida en Colombia desde hace 14 años por la Asociación Colombiana para la Formación Religiosa Colombiana (Acoforec), conformada por un grupo de sacerdotes y laicos que buscan «desarrollar la Catequesis del Buen Pastor mediante la creación, organización y administración de centros, y de toda clase de actividades y eventos, tendientes a la formación religiosa católica, moral y social», como menciona la Asociación en su página web.
A través de la enseñanza del Buen Pastor, tal como explicó Yolanda Guillén, de Acoforec, en diálogo con Gaudium Press, «hay un espacio donde los niños pueden encontrarse con Jesús», por medio de anuncios que logran «un encuentro en el corazón, no de información, sino de una relación con Jesús Buen Pastor -que es el centro de la catequesis: la Parábola del Buen Pastor-«.
Guillén también explicó que los trabajos que se desarrollan, a través de esta catequesis de iniciación cristiana, son bíblicos y litúrgicos, y corresponden a las etapas de la edad del niño. Por ejemplo, con los niños menores de 6 años, «que son netamente sensoriales, los materiales son concretos. Lo mismo que nosotros nos acercamos a la Biblia, ellos se acercan a los materiales», añadió Guillén.
Sobre la forma como se llevan a cabo las catequesis, igualmente expuso que éstas se distribuyen en dos horas semanales, donde una parte es dedicada al anuncio y el resto del tiempo se desarrolla a través del encuentro del niño con un material especial que el mismo menor escoge. Allí «hay mucha alegría, mucho gozo en el encuentro con Jesús», resaltó Guillén.
Asimismo, comentó que parte del trabajo de la enseñanza, consiste en el desarrollo de dibujos; «Investigando esos dibujos que ellos han hecho, hemos podido encontrar que los niños hacen síntesis de diferentes anuncios. Por ejemplo, entre el nacimiento y la resurrección, o esquematizado por un niño el cuerpo místico, donde Jesús es la cabeza y todos nosotros somos el cuerpo».
En la actualidad la «Catequesis del Buen Pastor» desarrolla la enseñanza del Evangelio con 150 niños que rotan en grupos de 15. La catequesis tiene presencia en varias parroquias de Bogotá, entre las que se encuentran la Parroquia Santa Bibiana, Nuestra Señora de Luján, Santa Amelia y Santa Clara. También funciona en el Centro de Evangelización y Catequesis (Cecam) en Manizales y en la Parroquia Nuestra Señora del Carmen en Medellín.
Gaudium Press / Sonia Trujillo
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