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Barcelona (Jueves, 28-10-2010, Gaudium Press) Que la próxima visita del Papa sea «una experiencia única y un recuerdo imborrable», en la que los barceloneses se muestren como los «mejores anfitriones», haciendo así gala de la «calidez» con la que saben tratar a sus huéspedes: fue ello y más lo expresado por Jordi Hereu, alcalde de Barcelona, en un bando (edicto) hecho público el día de hoy.
Como ya notició Gaudium Press, el Papa estará en Barcelona el domingo 7 de noviembre. En la mañana, Benedicto XVI encontrará en la Sala Museal de la Sagrada Familia a la pareja real, el rey Juan Carlos con su esposa Sofía de Grecia. A las 10:00 horas, presidirá la misa con dedicación de la iglesia y el altar de la Sagrada Familia, que será designada como basílica, tras lo que rezará el Ángelus Domini en la Plaza de la iglesia de la Sagrada Familia.
También ese domingo está programado un almuerzo con las autoridades eclesiales, en el arzobispado de Barcelona, cardenales y los obispos presentes en la celebración de la dedicación de la Sagrada Familia. El último punto del viaje del Santo Padre a España previsto en el programa -antes de la ceremonia de despedida en el aeropuerto- será una visita, a las 17:15 horas, al centro médico de la «Obra Benéfico-social nen Déu». El Santo Padre partirá para Roma a las 19:15 horas.
El alcalde Hereu resalta que la visita del Papa es una ocasión «excepcional» para que Barcelona se manifieste como una ciudad que «trabaja por la paz y la cooperación» entre ciudades y pueblos y que está «orgullosa» de su historia, que «nadie podría entender sin la aportación fundamental» de la Iglesia católica.
Hereu también invitó a que los barceloneses adornen balcones y ventanas con «senyeres», bandera catalana que «identifica, representa y hermana» a ese pueblo.
Con información de Cope
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