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Santiago (Jueves, 20-01-2010, Gaudium Press) Continuando con su intensa agenda el Arzobispo de Santiago, monseñor Ricardo Ezzati, visitó el martes 18 el Santuario del Padre Hurtado y el Hogar de Cristo, ocasión en la que compartió un momento de oración con algunos presbíteros y voluntarios que trabajan en el recinto religioso.
Ante la tumba del Santo chileno, el prelado destacó que «los santuarios son siempre un oasis en medio del desierto de la ciudad y de lo frenético que es la cultura contemporánea». En su oración encomendó a San Alberto Hurtado que interceda para mantener siempre viva en la Iglesia «la conciencia de la opción preferencial y evangélica que es la opción por los más pobres y desamparados».
«He querido poner bajo la protección del Padre Alberto a todos los sacerdotes de la Arquidiócesis agradeciendo su servicio, su celo apostólico y al mismo tiempo pidiendo para ellos todas las Gracias que necesitan para continuar en la Iglesia la misión de ser discípulos misioneros de Jesús, signos del Buen Pastor en medio del pueblo», expresó.
Durante el desarrollo de su visita, monseñor Ezzati se dirigió a las dependencias del Hogar de Cristo, allí recorrió la hospedería de mujeres, de adultos mayores, los comedores y la sala de pacientes terminales; todos estos servicios ofrecidos gratuitamente a hombres, mujeres, niños y ancianos de escasos recursos.
Muy emocionado agradeció la dedicación y dignidad con que son tratadas las personas que asisten en buscan de ayuda y consuelo a esta obra de caridad fundada por San Alberto en 1944. «Dios quiera que este testimonio del Hogar de Cristo y sus voluntarios pueda seguir siendo una profecía que muestre (…) que las personas más abandonadas son sujetos de dignidad y son hijos de Dios que debemos amar, respetar y promover», sentenció el obispo.
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