Colombia sigue las huellas de Juan Pablo II 25 años después de su visita al país

Bogotá (Jueves, 03-03-2011, Gaudium Press) «Un mensaje oportuno también para el pueblo colombiano, al que deseo hacer llegar mi cercanía y afecto con motivo de las diferentes iniciativas que se llevan a cabo para conmemorar que, hace veinticinco años, mi venerado predecesor, el Papa Juan Pablo II, se puso en marcha ‘con la paz de Cristo, por los caminos de Colombia’. Que Santa María la Virgen, Madre del Amor hermoso, acompañe los esfuerzos que en aquella querida Nación latinoamericana, y en otras partes del mundo, se realizan para promover la fraternidad y la concordia entre todas las personas sin excepción alguna»: con este mensaje que el Papa Benedicto XVI pronunció el pasado 20 de febrero en el tradicional Ángelus dominical fue inaugurado hoy en Bogotá el foro «Juan Pablo II y su huella en Colombia 25 años después», que conmemora la visita que el Papa polaco realizó al país suramericano en julio de 1986.

Foto: Conferencia Episcopal de Colombia

El evento -que contó con la presencia de varias personalidades colombianas, representantes del sector académico, político, y cultural- es una de las iniciativas que la Embajada de Colombia en el Vaticano viene promoviendo durante este 2011 para destacar el legado que dejó Juan Pablo II tras su paso por el país, así como la figura de quien en mayo será beatificado en Roma.

Precisamente, el acto de apertura del foro -que ocurrió hacia las 9:00 de la mañana, hora local – contó con la presencia del Presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, quien en su discurso, luego de hacer un corto recuento de los momentos más significativos de la visita del pontífice polaco en 1986, y en nombre de los colombianos, destacó con emotividad: «¡qué amor paternal infinito recibimos de Juan Pablo II», y subrayó que el «Papa viajero» -como era también conocido el Santo Padre -«así como dejó huella en la Iglesia (…), dejó huella en la historia mundial (…), dejó una huella indeleble y amorosa en alma de Colombia».

El presidente Santos, también hizo referencia al mensaje que Juan Pablo II trajo a los colombianos en 1986, resaltando que su enseñanza «sigue siendo fuente de inspiración (…) para todos quienes lo escuchamos y los que lo releemos pasados los años».

Igualmente, el mandatario de los colombianos añadió: «Juan Pablo II, el Papa peregrino, vino a Colombia y sembró semillas de esperanza en el corazón de los colombianos. Sembró la palabra de Dios y sus frutos se recogen todos los días en las buenas obras de millones de colombianos que quieren hacer el bien, que quieren trabajar honestamente y que quieren crecer en virtud con sus familias. ¡Qué bueno, qué oportuno, recordar hoy su visita, recordar hoy su legado, recordar hoy sus palabras!».

Foto: Felipe Ariza, Of. Prensa Presidencia de Colombia

El foro hizo un recorrido sobre la huella que el Papa Wojtyla dejó en la educación y la familia, el mundo laboral y empresarial, en la paz y reconciliación, en el escenario internacional, en la virtud del hombre público y en la comunicación.

Entre los panelistas se encontraban César Mauricio Velásquez Ossa, Embajador de Colombia ante la Santa Sede y promotor de esta iniciativa; Rodrigo Noguera Calderón, Rector de la Universidad Sergio Arboleda; José Manuel Restrepo, Rector del Colegio de Estudios Superiores de Administración (CESA); P. Carlos Novoa, de la Facultad de Teología de la Pontificia Universidad Javeriana; y Augusto Ramirez Ocampo, ex ministro de Relaciones Exteriores de Colombia, quien justamente ejercía este cargo durante la visita del Papa Juan Pablo II al país.

También participaron del foro el Nuncio Apostólico en Colombia, Mons. Aldo Cavalli, quien en la apertura del encuentro dirigió la oración del Papa Juan Pablo II por Colombia; el Arzobispo emérito de Bogotá, Cardenal Pedro Rubiano Sáenz, y la Ministra de Relaciones Exteriores de Colombia, María Ángela Holguín, quien acompañó al mandatario de los colombianos en la apertura del evento, entre otras personalidades.

Además de la Embajada de Colombia ante la Santa Sede, el foro contó con el apoyo de la Fundación Revel y la Fundación Konrad Adenauer Stiftung.

Gaudium Press / Sonia Trujillo