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Toluca de Leredo (Miércoles, 23-03-2011, Gaudium Press) El próximo 3 de julio los ciudadanos del Estado de México tendrán una jornada electoral que definirá quien será su próximo Gobernador. Con ocasión de esta gesta electoral, los obispos de las 11 diócesis que hacen parte del Estado mexicano, a través de un mensaje, ofrecieron una reflexión a candidatos, ciudadanos católicos y personas de buena voluntad, a la luz del Evangelio y de la Doctrina Social de la Iglesia.
«Invitamos a todas y todos a vivir los valores de la Democracia, en un ambiente de participación ciudadana, de tranquilidad, de tolerancia y reconciliación, todo ello orientado a la edificación del bien de la sociedad»; dicen los Obispos al comenzar su mensaje.
Más adelante, en la misiva, los obispos centran su reflexión en tres aspectos fundamentales: la situación socio-política del Estado, una iluminación desde el Evangelio y la Doctrina Social de la Iglesia, y sugerencias para la acción.
Sobre el contexto político y social que vive actualmente el Estado mexicano, los jerarcas de la Iglesia local manifestaron su preocupación al ver como se ha debilitado el tejido social. «Pasamos por una crisis de moralidad, por la ausencia de principios y valores que se manifiesta en incumplimiento de algunas leyes, en la falta de respeto y apoyo a la vida, así como a la integridad de las personas, favoreciendo la mentira y la corrupción», destacan.
Igualmente, recuerdan que los Obispos de la Iglesia Católica no se identifican con ningún partido político, pero que si buscan ofrecerles a los ciudadanos -católicos y hombres de buena voluntad – «los principios y criterios que brotan del Evangelio, para que ellos, con plena libertad, decidan de manera responsable sus opciones políticas».
Continuando con su mensaje, también resaltan la labor política como «una de las actividades más nobles al servicio de los demás», y recuerdan que toda autoridad viene de Dios: «si bien el poder de los gobiernos temporales no puede identificarse con el de Dios, la expresión de la voluntad del pueblo es señal de que las autoridades así constituidas legítimamente, merecen respeto y obediencia en todo lo que no contradiga la dignidad humana».
Los obispos del Estado Mexicano, asimismo, y como sugerencias para la acción, llaman a la ciudadanía a «impulsar una cultura de la democracia» que consista en vivir los valores de dignidad humana, justicia, obediencia, libertad y verdad en las familias, parroquias y diócesis; «éstos van más allá de emitir un voto a favor de un candidato; esto significa hacer de la democracia un estilo de vida», añaden.
Del mismo modo, recordando parte de la Exhortación Apostólica «Christifideles laici» del Papa Juan Pablo II sobre la vocación y misión de los laicos en la Iglesia y en el mundo, los obispos animan a los fieles a participar en la vida política; «los fieles laicos de ningún modo pueden abdicar de la participación en la política; es decir, de la multiforme y variada acción económica, social, legislativa, administrativa y cultural, destinada a promover orgánica e institucionalmente el bien común».
Finalmente, los prelados hacen un llamado a todos los candidatos que participarán en las elecciones para que sean «testigos de los valores y principios éticos democráticos: la verdad, la justicia, el honor y la transparencia», puesto que con ello «devolverán a la política su nobleza y al pueblo la credibilidad en sus gobernantes».
Con información de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM).
Gaudium Press / Sonia Trujillo
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