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Lima (Lunes, 04-04-2011, Gaudium Press) A pocos días de que la nación peruana acuda a elegir su próximo presidente, el Cardenal Juan Luis Cipriani Thorne, Arzobispo de Lima, volvió a abordar el tema electoral, desde la perspectiva de la doctrina social católica, en su programa radial Diálogo de Fe. Las elecciones en la nación andina serán el próximo domingo 10 de abril. Al tiempo que el presidente de la República, serán elegidos 130 congresistas y 5 parlamentarios andinos. Si ninguno de los candidatos a presidente de la República obtiene el 50% o más del caudal electoral, se procederá a una segunda vuelta electoral presidencial con los dos candidatos más votados.
El purpurado limeño animó a no permitir que las encuestadoras se conviertan en las protagonistas ni dejarse influenciar por los datos numéricos, ya que la responsabilidad de elegir al futuro presidente del Perú es de cada uno.
«No dejemos que una cifra y unas estadísticas vayan canonizando a algunos candidatos o descartando a otros. El pueblo es soberano y la responsabilidad es personal. Desde aquí invito a todos a reflexionar bien sobre el futuro del Perú», exhortó el Cardenal Cipriani desde Roma, donde participa de la Reunión Plenaria de la Pontificia Comisión para América Latina.
Sobre las reuniones que ha sostenido con diversos candidatos a la presidencia del Perú, el Arzobispo de Lima expresó que fueron para hablar de temas fundamentales según las enseñanzas de la Iglesia y que interesan al pueblo peruano, como el rechazo al aborto, la defensa de la familia y del matrimonio de un hombre y una mujer.
«Que los planes de gobierno sean viables y una ayuda a lo que es fundamentad: la familia como centro de una política social, el matrimonio como el lugar central de la organización de una sociedad; y un rechazo al aborto como un homicidio», señaló.
«No se trata de decir estamos de acuerdo, nos parece muy bien, sino también revisar sus planes de gobierno y quien había propuesto otras cosas debe de sostenerlas o rectificarlas. La educación en valores morales tiene que ser mucho más que una propaganda», dijo.
Con información de la oficina de Comunicaciones del Arzobispado de Lima.
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