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Rigali (Miércoles, 20-04-2011, Gaudium Press) Un mensaje de paz, de perdón y de reconciliación: así se pueden titular las palabras de Mons. Thaddée Ntihinyurwa, arzobispo de Kigali, capital de Ruanda, en la homilía de la misa del pasado domingo de Ramos, celebrada en la catedral St. Michael. Los cristianos deben utilizar el perdón como un pilar y un arma para luchar contra los enemigos, manifestó el prelado, según reporta NewTimes, diario ruandés.
Mons. Ntihinyurwa afirmó que es prudente para los cristianos imitar a Jesucristo en el perdón a los enemigos, como una forma de mejorar la cooperación y la concordia entre todos. «Debemos preguntarnos si estamos siguiendo a Jesús, el hijo de Dios. ¿Perdonamos nosotros, como él hizo con sus enemigos, especialmente a aquellos que lo torturaron?», dijo.
«Por tanto, tenemos que establecer mecanismos para imitar a Jesucristo, para que obtengamos una vida buena y duradera», convocó el arzobispo.
Ruanda, país de África central, ha sido muy afectado por la violencia de tipo étnico con implicaciones religiosas. En 1994, en lo que se conoce como el «Genocidio de Ruanda», se enfrentaron las etnias hutu y tutsi, siendo los tutsi, grupo minoritario, casi eliminado. Se calcula que 4 de 5 miembros de la etnia tutsi fueron masacrados. Se especula también que entre 500.000 y 1.000.000 de personas fueron muertos en ese genocidio.
Un Cristo padeciente, y que perdona, hace parte de las reflexiones de Mujawabera, de 60 años, uno de los asistentes a la ceremonia de domingo de Ramos presidida por Mons. Ntihinyurwa: «Durante la Semana [Santa], yo centro mi mente en la última semana de la vida de Jesús, cuando estaba siendo golpeado y torturado. Así, como su seguidor, eso me ayuda a despejar mis caminos», dijo.
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