Lima (Miércoles, 29-06-2011, Gaudium Press) El Monasterio de la Encarnación de Lima -habitado por religiosas agustinas de clausura, y la comunidad de este tipo más antigua de la ciudad y del Perú- conmemoró el pasado 21 de junio 450 años de fundación. El Cardenal Juan Luis Cipriani Thorne, arzobispo primado, celebró la misa de acción de gracias por la memoria.
Cardenal Cipriani, en la celebración de la eucaristía de Acción de Gracias |
Asimismo, desde el día 18 de junio varios acontecimientos han querido marcar la importancia del aniversario del monasterio, que es ‘Alma Mater’ de todos los conventos de clausura que se fueron fundando a lo largo de los tiempos en Lima. El propio sábado 18, el Coro Nacional de Niños del Perú ofreció un concierto de música sacra en homenaje a las religiosas. El 19, Mons. Bruno Musarò, Nuncio Apostólico en el Perú, celebró la Misa por la salud e intenciones de las Contemplativas. El lunes 20, Mons. Salvador Piñeiro, obispo Castrense del Perú, celebró una eucaristía por las Vocaciones
La organización de los diversos eventos estuvo a cargo de los Heraldos del Evangelio, quienes regentan la iglesia que linda con el monasterio, y que lleva como título también Nuestra Señora de la Encarnación.
Historia
El Monasterio nace en 1558, como un Beaterio (casa donde damas piadosas vivían en comunidad, dedicadas a la oración), bajo la advocación de Nuestra Señora de los Remedios. Ellas vivían según la regla de San Agustín. Posteriormente, en 1561 -hace 450 años- el entonces Arzobispo de Lima permitió a estas damas la conformación de un Monasterio y les impuso el hábito agustino, dando inicio a la vida de esta Casa contemplativa.
En tiempos de la Colonia el monasterio llegó a albergar centenas de religiosas (casi 400, sin contar las novicias, estudiantes, servidoras, etc.) siendo la Abadesa una de las principales personalidades del virreinato del Perú.
El Nuncio Apostólico celebró el domingo 19 |
El Convento de la Encarnación fue el Alma Mater de todos los conventos de clausura que se fueron fundando en Lima. De él salieron monjas para la fundación del Monasterio de la Concepción el 18 de Agosto de 1573; para reedificar y renovar el de monjas Bernardas, el 21 de febrero de 1579 y para fundar el de Santa Clara el 10 de Septiembre de 1605.
Presionado por el crecimiento de la ciudad, el área original del convento fue disminuyendo: en 1858 perdieron la mitad del terreno para dar lugar a una estación de trenes; en 1910 le fueron expropiados 3.325 metros cuadrados para prolongar la Avenida Nicolás de Pierola.
El terremoto ocurrido en el año de 1940, seguido de un devastador incendio, destruyó de tal forma el convento y la iglesia que obligó a las religiosas a vender todo y trasladarse a su nuevo emplazamiento en la Avenida Brasil donde, desde el 6 de marzo de 1943, pasó a vivir la comunidad.
El nuevo local fue diseñado por el arquitecto Alfonso G. Anderson, los padrinos de la obra fueron el presidente de la república Manuel Prado y Ugarteche y su esposa Enriqueta Garlad, y fue bendecido por el monseñor Pedro Pascual Farfán, arzobispo de Lima.
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