Washington (Miércoles, 06-07-2011, Gaudium Press) «Matrimonios estables: cada vez más ricos»: es esta la conclusión que es posible extraer del estudio de la entidad americana «Brookings Institution», que concluye también que las familias monoparentales, particularmente aquellas que no tienen estudios superiores, son cada vez más pobres. De acuerdo al último censo realizado en los EE.UU., por primera vez en la historia del país son menos los hogares que formados por parejas casadas, solo 45 %, frente a familias de otro tipo de composición.
Ya en un reportaje de 2009, Ron Haskins, también de Brooklin Institution, decía que «mayores tasas de matrimonio entre los pobres beneficiarían a los mismo adultos pobres, a sus hijos y a la nación. (…) Yo estoy a favor de los programas de promoción del matrimonio llevados a cabo por organizaciones de base comunitaria tales como iglesias y otros grupos cívicos sin fines de lucro. Las actividades que estos grupos deben patrocinar incluyen consejería, educación para el matrimonio, asistencia laboral, crianza de los hijos, control de la ira, evitación de la violencia doméstica, y administración del dinero».
Ese mismo informe de Haskins, recordaba cómo según la Oficina del Censo de los EE.UU., los niños que viven en familias monoparentales tienen cinco veces más probabilidades de vivir en la pobreza. También hay una alta probabilidad de que abandonen la escuela, sean arrestados, se vean envueltos ellos mismo embarazo adolescente, tengan más problemas de salud mental, y tengan menos probabilidades de ser empleados o vayan a la escuela, cuando se conviertan en adultos jóvenes. De hecho, los propios padres se encuentran física y psicológicamente mejor cuando están casados con que cuando están solos.
Lamentablemente, el último censo realizado en los EE.UU. revela que en todos los estamentos de la población americana el número de familias monoparentales va en aumento. Entretanto, de acuerdo a datos del Mathematica Policy Research del 2005, el 80% de las parejas que tienen niños fuera del matrimonio desean tener la «buena suerte» de casarse algún día, por lo que diversos estamentos exigen del gobierno apoyo para que estos deseos se transformen en realidad, dada la importancia del matrimonio estable incluso para la propia economía de la nación.
Entretanto, críticos gubernamentales señalan que el hecho de que las mujeres solteras hayan votado masivamente por el actual presidente, hace que se demuestre desinterés por programas de apoyo a instituciones sin ánimo de lucro que favorecen el matrimonio estable, o directamente ocasiona la no realización de programas estatales en este sentido.
Deje su Comentario