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Pekín (Lunes, 25-07-2011, Gaudium Press) Ignorando una vez más las demostraciones públicas de repudio del Papa Benedicto XVI delante de los seguidos nombramientos de obispos sin consentimiento del Vaticano, la Iglesia Patriótica de China, subordinada al gobierno de Pekín, anunció que se prepara para ordenar por lo menos siete nuevos prelados. Las fechas para las ordenaciones, entretanto, aún no fueron definidas, pues requieren «un complicado trabajo preliminar» informó al diario China Daily el vicepresidente de la Iglesia Patriótica, Giuseppe Guo Jincai, según reporta la agencia Ansa.
Respecto a la práctica de ordenar y nombrar obispos sin orden expresa de la Santa Sede, el portavoz de la Iglesia Patriótica de China, Yang Yu, afirmó que ellas son «necesarias» para la sobrevivencia de la iglesia en el país, alegando que la institución todavía cuenta con aproximadamente 40 diócesis sin obispos. No obstante, a pesar de los nombramientos unilaterales, la Iglesia Patriótica afirma «esperar poder mejorar su relación con el Vaticano».
La relación entre la Santa Sede y China comenzó a sufrir una serie de dificultades al final del 2010, con el nombramiento de Jincai como obispo católico. En junio y julio de este año, otros dos sacerdotes más recibieron su ordenación episcopal sin autorización del vaticano: respectivamente, el padre Paul Lei Shiyin, que fue nombrado obispo de Leshan, y el sacerdote Giuseppe Huang Bingzhang, que asumió la diócesis de Shantou.
Para empeorar la situación, fuentes chinas denunciaron que diversos padres chinos ligados a la autoridad del Vaticano fueron forzados a participar de ceremonias de ordenación sin consentimiento del Papa.
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