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Bogotá (Jueves, 04-08-2011, Gaudium Press) Con la participación de 100 diáconos permanentes de Colombia se realizará en la sede de la Conferencia Episcopal de este país (CEC) el Encuentro Nacional de Formación de quienes ya pertenecen a este ministerio del orden. El evento, que se desarrollará en torno al tema «Los diáconos permanentes: apóstoles en sus familias y en las familias», será del 12 al 15 de agosto en Bogotá.
«El Encuentro Nacional es una actividad que se hace cada 2 años dirigida especialmente a la formación de los diáconos permanentes, aquellos que ya han sido consagrados en el sacramento del orden en el Diaconado, y que necesitan estar siembre actualizados, vivenciar y conocer un poco más de las posibilidades de sus ministerios en la tarea evangelizadora de la Iglesia»; explica el padre Elkin Fernando Álvarez, director del Departamento de Ministerios Jerárquicos de la CEC, en entrevista con el Departamento de Comunicaciones del Episcopado Colombiano.
Como dice el tema del encuentro, éste centrará su atención en la pastoral familiar y la misión que el Diácono realiza al interior de las mismas familias. Asimismo, como ha expresado el Padre Álvarez, el encuentro prolongará y será ocasión para compartir las experiencias del 2o Congreso Latinoamericano y del Caribe de Diaconado Permanente, que ocurrió en Brasil en el mes de mayo, con la participación del Obispo Auxiliar de Bogotá, Mons. José Roberto Ospina, el mismo padre Álvarez, otros sacerdotes y varios diáconos permanentes. También se abordará el tema de los nuevos movimientos religiosos que están surgiendo en la actualidad.
«Invitamos a toda la Iglesia a orar para que el Espíritu Santo vaya abriendo caminos para que se pueda vivir un ministerio diaconal muy fecundo y floreciente en Colombia», es la invitación que hace el director del Departamento de Ministerios Jerárquicos para que los fieles del país se unan en oración con ocasión del encuentro.
En la actualidad Colombia cuenta con 457 diáconos que están presentes en 22 de las 76 jurisdicciones eclesiásticas del país. «Es un buen número, pero aún el ministerio diaconal es desconocido para la mayoría del Pueblo de Dios», dice al respecto el Padre Álvarez.
El Diaconado Permanente siempre ha existido desde la Iglesia de los primeros siglos. Tras un tiempo que estuvo suprimido, como explica el sacerdote, «el Vaticano II, (…) restauró el Diaconado Permanente». En Colombia este ministerio fue aprobado en el año 1968, siendo ordenado el primer diácono permanente en el año 1975.
La principal misión del diácono, como resalta el Padre Álvarez, es la de ser, ante todo, «un testigo de la caridad» en medio del Pueblo de Dios. Esta es la razón de porqué, además de su doble sacramentalidad -puesto que la mayoría de los diáconos permanaes están casados -, así como sus funciones litúrgicas, especialmente de la lectura y proclamación de la palabra, además de otras, su misión se centra en prestar su servicio en pastorales como la carcelaria y de los enfermos.
Con información de la Conferencia Episcopal de Colombia (CEC).
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