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San Pablo (Jueves, 01-09-2011, Gaudium Press) El Presidente de la Regional Sur 1 (que abarca el estado de San Pablo) de la Conferencia Nacional de Obispos del Brasil (CNBB) y Arzobispo de San Pablo, el Cardenal Odilo Pedro Scherer, concedió una rueda de prensa donde habló sobre la próxima Jornada Mundial de la Juventud (JMJ), que ocurrirá en Río de Janeiro en el 2013. La preparación a este evento iniciará el próximo 18 de septiembre con la llegada de la cruz y el ícono de Nuestra Señora a la capital paulista.
En compañía del vicepresidente y secretario general de la Regional Sur 1, respectivamente, Mons. Moacir Silva y Mons. Tarcísio Scaramussa, el purpurado afirmó que el anuncio de la sede de la próxima JMJ fue recibido con mucha alegría por la Iglesia de Brasil, pero también con mucha preocupación, porque trajo la responsabilidad de sus preparativos. En este sentido, el Arzobispo de San Pablo dio más detalles sobre cómo será la acogida de los símbolos de la JMJ que, conforme él, recorrerán todas las diócesis del estado de San Pablo, y el resto del país, hasta llegar a Río de Janeiro, en julio del 2013.
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| Peregrinos brasileños reciben la Cruz y el Ícono durante la JMJ de Madrid |
Mons. Odilo dijo que la cruz y el ícono serán recibidos en San Pablo con un gran evento de evangelización titulado «Bote Fe». Conforme el prelado, la celebración sucederá desde las 9:00 hasta las 21:00 horas, en el Parque de Materiales de la Aeronáutica (PAMA), próximo al Campo de Marte, con shows, reflexiones sobre la jornada y testimonios de jóvenes brasileños que participaron de la última JMJ realizada en Madrid.
El Cardenal explicó también la importancia de los símbolos de la Jornada. Conforme el purpurado, la cruz, que fue entregada por el Papa Juan Pablo II, idealizador de la JMJ, es siempre un símbolo de Jesucristo, una manera de llamar a los jóvenes a encontrarse con Él. Y el ícono de Nuestra Señora es la representación de Su Madre junto a aquellos que siguen a Jesús. «Donde está Jesús, está su madre. Donde está la Iglesia, que es la comunidad de los discípulos, allí está la madre del Señor, la madre de los discípulos», dijo.
Respecto a la llegada anticipada de los símbolos, -normalmente ellos desembarcan en el país sede en el año del evento y comienzan a peregrinar en el Domingo de Ramos- Mons. Odilo explicó que esto se debe a las dimensiones continentales del país. «Para recorrer las 275 diócesis de Brasil es preciso mucho tiempo», declaró.
El secretario general Mons. Tarcísio también se pronunció durante la rueda de prensa, explicando cómo será la recepción de la cruz y el ícono de Nuestra Señora en las demás 41 diócesis que componen la Regional. Conforme el prelado, en cada una de las sub-regionales también se realizarán eventos comunes titulados de «Bote Fe». Mons. Tarcísio informó que cada diócesis elaborará un recorrido propio que se hará respecto a las realidades locales.
Después de peregrinar por el estado de San Pablo, la cruz y el ícono irán a Minas Gerais. Según informaciones de la Arquidiócesis de San Pablo, mientras estén peregrinando por el Brasil, los símbolos de la JMJ darán un salto en nuestros países vecinos, más específicamente en las capitales de los países del Cono Sur: Buenos Aires, Argentina; Asunción, Paraguay; Santiago, Chile; y Montevideo, Uruguay.
Con informaciones de la Arquidiócesis de San Pablo.
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