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Nueva York (Jueves, 29-09-2011, Gaudium Press) El secretario del Vaticano para las relaciones con los Estados pidió a la Asamblea General de la ONU que tome «decisiones corajudas» en lo que dice respecto al reconocimiento oficial de Palestina como Estado-miembro de las Naciones Unidas. El arzobispo Dominique Mamberti hizo su pronunciamiento durante el debate general de la 66ª sesión de la Asamblea General.
Para Mons. Mamberti, los organismos de las Naciones Unidas deben tomar medidas que lleven a la «concretización del derecho de los palestinos de tener un Estado propio, independiente y soberano» y el derecho de los israelíes «a la seguridad», en una solución que pasa por la existencia de «dos Estados» con «fronteras internacionalmente reconocidas».
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| Mons. Mamberti se dirige al plenario de la ONU |
Palestina presentó el pasado viernes su pedido oficial de reconocimiento como miembro de pleno derecho de la ONU, que ya fue encaminado al Consejo de Seguridad, que comienzó hoy la sesión formal para discutir el pedido de la Autoridad Nacional Palestina.
La Santa Sede hizo votos de que sea encontrada una «solución definitiva» para esta cuestión, recordando que la resolución 181 de 1947 ya presentaba la «base jurídica fundamental para la existencia» de los Estados de Israel y Palestina.
Mons. Dominique Mamberti apeló a todas las partes, para que retomen las negociaciones «con determinación», con una mayor «iniciativa» y «creatividad» de la comunidad internacional, de modo a alcanzar una «paz duradera» en la región.
En Nueva York, el diplomático de la Santa Sede presentó también alertas sobre las situaciones de «emergencia humana», particularmente en el llamado Cuerno de África, la actual crisis económica y financiera, así como sobre la «falta de respeto por la libertad religiosa, una amenaza para la seguridad y la paz».
En mayo de 2009, en una visita a la ciudad de Belén, Cisjordania, Benedicto XVI saludó al presidente de la Autoridad Palestina, Mahmoud Abbas, afirmando: «La Santa Sede apoya el derecho de su pueblo a una Palestina soberana en la tierra de vuestros antepasados, segura y en paz con sus vecinos, dentro de confines internacionalmente reconocidos».
«Aunque en el presente esta finalidad parezca lejos de haber sido alcanzada, aliento a vuestra excelencia y todo su pueblo a conservar encendida la llama de la esperanza, esperanza de que se pueda encontrar un camino de compromiso entre las aspiraciones legítimas, tanto de los israelíes como de los palestinos, la paz y la estabilidad», dijo el Papa.
Gaudium Press / Luciano Batista
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