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Washington (Martes, 22-11-2011, Gaudium Press) Como una oportunidad para agradecer y honrar, por su servicio fiel y generoso, a miles de hermanas, hermanos y sacerdotes en edad avanzada de comunidades religiosas, el próximo 10 y 11 de diciembre se realizará en la mayoría de parroquias de los Estados Unidos la 24ª Colecta Nacional del Fondo para la Jubilación de Religiosos.
Con el lema «Comparta su cuidado», la colecta es organizada por la Oficina para la Jubilación de Religiosas (NRRO) en los Estados Unidos, con la finalidad de apoyar las necesidades de los sacerdotes y religiosas ancianos que requieren ayuda y que, en no pocas ocasiones, no pueden recibir asistencia de parte de sus comunidades.
«Hoy, muchas comunidades religiosas luchan por cuidar a sus miembros ancianos. Los costos más y más elevados de los cuidados médicos y los menores ingresos hacen que sea cada vez más difícil proporcionar los medicamentos, la atención de los ancianos y los servicios básicos que necesitan. Los conventos antiguos y otras instalaciones implican desafíos adicionales en relación con la seguridad y el acceso para los discapacitados», destaca la información suministrada por la NRRO.
Como dice la nota de prensa de la Oficina Nacional para la Jubilación de Religiosos, la Colecta anual proporciona asistencia a un promedio de 34 mil hermanos, hermanas y sacerdotes mayores de 70 años. Este fondo, desde que fue creado en el año 1988, ha recibido aportes de los católicos estadounidenses por más de 640 millones de dólares.
Igualmente, desde el año 1989 se han distribuido casi 540 millones de dólares para apoyar el cuidado diario de sacerdotes, religiosas y religiosas que así lo requieren, y unos 67 millones de dólares han sido asignados para proyectos de autoayuda que han puesto en marcha comunidades religiosas, que incluyen planes de jubilación y centros de salud, además de otras iniciativas que benefician a los miembros en edad avanzada.
Pese a lo que se ha alcanzado gracias al fondo, la ayuda sigue siendo necesaria. Como se expone en información de la NRRO, una de las principales dificultades que enfrentan las comunidades religiosas, especialmente con los sacerdotes y religiosos ancianos, es el alza vertiginosa de los costos: «hay más de 34.000 religiosos mayores de 70 años viviendo en los Estados Unidos. En el 2010, la media del costo anual de sus cuidados superaba los 35.000 dólares por persona», y sólo en el mismo año «el costo total para sustentar a los religiosos de edad avanzada excedió los 1.000 millones de dólares».
Es así, y dándole una respuesta a esta problemática, que la NRRO puso en marcha desde el 2009 una iniciativa que tiene como finalidad brindar formación, consulta y asistencia financiera para que las comunidades religiosas con dificultades económicas, especialmente en el tema de la jubilación de sus miembros, puedan soportar financieramente el retiro de sus religiosos. Según dice la información de la Oficina Nacional para la Jubilación de Religiosos, desde que se puso en marcha, esta iniciativa ha ayudado a desarrollar planes de pensión a largo plazo de 55 comunidades que representan a más de 7.000 religiosos.
El Fondo para la Jubilación de Religiosos, es una iniciativa de los Obispos Católicos de los Estados Unidos, quienes en el año 1988 pusieron en marcha este fondo para responder a la falta de financiación para las jubilaciones de los religiosos y sacerdotes.
Con el objeto de coordinar la colecta anual del fondo, así como la distribución de los recursos colectados, también fue creada la Oficina Nacional para la Jubilación de Religiosos. Esta oficina cuenta con el apoyo de la Conferencia de Superiores Mayores, el Consejo de Superiores Mayores de Religiosos, la Conferencia de Mujeres Religiosas y la Conferencia Episcopal de los Estados Unidos.
Con información de la Oficina Nacional para la Jubilación de Religiosos (NRRO).
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