Arzobispo de Medellín, en Colombia, habla sobre la "urgente necesidad que tiene el pueblo de Dios de muchos y santos sacerdotes"

Medellín (Viernes, 25-11-2011, Gaudium Press) «Es necesaria una predicación directa y una catequesis orgánica sobre el misterio de la vocación en la Iglesia, sobre el valor del sacerdocio que hunde sus raíces en la condición de Cristo Buen Pastor y sobre la urgente necesidad que tiene el pueblo de Dios de muchos y santos sacerdotes. Estamos viviendo un momento en el que se ha mermado notablemente el número de seminaristas en la Arquidiócesis de Medellín y nos debe comenzar a preocupar seriamente el futuro de nuestra vida eclesial. Es una situación frente a la cual todos nos debemos sentir responsables»; con estas palabras Mons. Ricardo Tobón Restrepo, Arzobispo de Medellín, en Colombia, se refirió en su mensaje semananal a la necesidad que hay en la Arquidiócesis de Medellín de más Pastoral Vocacional.

El Arzobispo, de manera enfática, también dice que «ha llegado el tiempo de hablar valientemente de la vocación al sacerdocio, como un don inestimable y una forma espléndida de servicio», intensificando a su vez -como agrega- un trabajo pastoral al interior de las familias, con los niños y con los jóvenes, y crear, además un semillero de grupos vocacionales al interior de las parroquias.

Según Mons. Tobón, «todos nos debemos sentir responsables» por las vocaciones sacerdotales

«Es urgente ayudar en cuanto sea necesario a nuestros Seminarios. La mejor manera de agradecer al Señor los presbíteros que nos ha dado es trabajar todos intensamente en la Pastoral Vocacional», agrega Mons. Tobón.

Sobre la pastoral de las vocaciones, dice que «toda pastoral de la Iglesia es pastoral vocacional», puesto que la labor evangelizadora debe orientarse para que cada persona descubra «la llamada que Dios le hace y la misión que le confía en el mundo».

Dice, además, que la pastoral vocacional es «un compromiso de todos los miembros de la Iglesia para ayudar al discernimiento de esa llamada inefable con la que Dios nos hace ser y al acompañamiento de la respuesta gozosa con la que cada cristiano acoge el proyecto divino sobre la propia vida».

Orar por las vocaciones

Mons. Tobón, igualmente, exhorta a orar por las vocaciones, especialmente al sacerdocio y a la vida consagrada: «El punto de partida es la oración, pues es Dios quien llama; por eso, Jesús nos pide que ‘roguemos al Dueño de la mies que nos envíe obreros a su mies’. Orando por las vocaciones, la Iglesia hace un acto de fe, al reconocer que son un don con el que Dios nos bendice».

Estas palabras las dirigió el Arzobispo de Medellín en el marco de las recientes ordenaciones sacerdotales ocurridas en la ciudad colombiana el pasado 19 de noviembre, donde fueron ordenados 20 nuevos presbíteros. Sobre este acontecimiento también hizo referencia Mons. Tobón Restrepo: «Con las ordenaciones sacerdotales del pasado 19 de noviembre, la bondad de Dios nos ha regalado veinte nuevos presbíteros para la Arquidiócesis de Medellín. Le damos gracias al Señor por estos nuevos obreros que envía a su mies, acogemos con profundo afecto a estos hermanos y pedimos en nuestra oración que tengan un ministerio feliz y fecundo».

Con información de la Arquidiócesis de Medellín.