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Concepción (Martes, 10-01-2012, Gaudium Press) El pasado fin de semana, el Arzobispo de Concepción, monseñor Fernando Chomali, se trasladó hasta la localidad de Ñipas para hacer entrega a las familias y comunidades afectadas por los incendios ocurridos en la zona, de la ayuda económica y material recolectada por la Pastoral Social de Cáritas.
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| Mons. Chomali en el centro |
Este importante aporte fue recibido por el párroco Edgardo Ojeda, de la parroquia Dulce Nombre de María, quien dijo a periodistas del arzobispado que “hemos atendido a gran parte de las familias afectadas, sin distinción de credo, creencias políticas o de otra índole”. “Me llamó mucho la atención un señor que lo había perdido todo, y el día que lo visitamos nos preguntó quiénes éramos, a lo que yo contesté ‘el párroco de Ñipas’. Yo creo que era evangélico, y vi cómo se emocionó mucho, tal vez porque nunca pensó que hermanos de otra religión lo iban a auxiliar”, manifestó.
Tras sostener un breve diálogo con el sacerdote, el obispo se dirigió al sector de Carrizales, uno de los más afectados por los incendios. En el lugar pudo constatar la magnitud de los daños causados por las llamas, así como el estado de total destrucción en que quedó la vivienda de la persona encargada de la comunidad católica del sector. Tras ello, monseñor Chomali arribó hasta la escuela Nueva Aldea para entregar un mensaje de consuelo y esperanza a todos quienes se albergan en dicho establecimiento. En la oportunidad, señaló a los presentes que “lo que hace la Iglesia no es un evento solidario, sino dar cumplimiento a lo que nos ha sido encomendado de acompañar a quienes sufren, algo que por cierto es constituyente de nuestra misión y que hacemos todos los días”.
Al terminar la jornada el prelado celebró la Santa Misa y encomendó a Dios a toda la comunidad de fieles, pero especialmente a aquellas familias que sufrieron gravemente a consecuencia los incendios.
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