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São Paulo (Domingo, 12-04-2009, Gaudium Press) Exactamente a las 11 horas de la mañana de este domingo, día 12 de abril, las campanas de la Catedral de la Sede, en el centro de São Paulo, tocaban. Era el último llamado para la Santa Misa de Pascua, que expresa la alegría de la Resurrección de Jesús Cristo.
El acto fue comandado por el cardenal arzobispo de São Paulo, Mons. Odilo Pedro Scherer, que antes de la misa habló rápidamente con la prensa sobre la importancia de la fecha. «Este es un período especial y de bendición para todos. Es la esperanza que se renueva para todos nosotros, cristianos, que aquí celebramos a Cristo, representado por el Cirio Pascual», dijo el cardenal.
La celebración tuvo inicio con las lecturas de las sagradas escrituras, seguida de la aspersión del agua bendita en toda la Iglesia. Después de la aclamación del evangelio, Mons. Odilo inició su homilía. «Este es el día que el señor hizo para nosotros. Es el primero de todos los domingos y el motivo que lo hace especial para nosotros cristianos», afirmó el cardenal. «Cuando nos reunimos en domingo, nosotros estamos recordando la resurrección de Cristo, el hijo de Dios».
Mons. Odilo Scherer nuevamente recordó a los fieles del tema de la Campaña de la Fraternidad de 2009 – Fraternidad y Seguridad Pública, comentando que todos deben estar atentos a la violencia que está suelta en el mundo. «Jesús fue víctima de la violencia, pero no sucumbió a ella. Debemos dar apoyo a quien sufre la violencia, como una señal de la presencia de Dios en nuestras vidas. Estamos con aquel que venció la violencia y la muerte. Combatamos todos los tipos de violencia.», dijo el cardenal.
Antes de la comunión, Mons. Odilo además reforzó el valor de la fe y de la resurrección de Cristo como un misterio de Dios. «La resurrección supera la Ciencia. La ciencia nunca irá explicar este milagro. Creer en tal acto es un acto de fe. Debemos creer en las palabras de aquellos que estuvieron allá y que registraron esta historia.»
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