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Bogotá (Viernes, 10-02-2012, Gaudium Press) En conversación con Gaudium Press en el marco de la 92º Asamblea Plenaria del Episcopado Colombiano, que culmina hoy en Bogotá, el Secretario General de la Conferencia Episcopal de Colombia (CEC), Mons. Juan Vicente Córdoba, habló sobre su posesión como Obispo de la Diócesis urbana de Fontibón en Bogotá, evento que tendrá lugar mañana 11 de febrero en la Catedral de la localidad bogotana con la presencia del Nuncio Apostólico en Colombia, Mons. Aldo Cavalli.
En un corto diálogo, el prelado manifestó su alegría por esta misión que le ha encomendado el Santo Padre como pastor de la diócesis urbana: «Yo estoy muy contento, creo que es un momento lindo de desplegar mi pastoreo. Y para un Obispo que el Papa le dé diócesis, es como a un papá y a una mamá que le dé hijos».
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| Mons. Córdoba manifestó su alegría por la misión que le ha encomendado el Santo Padre como pastor de la Diócesis urbana de Fontibón / Foto: CEC |
Explicó también que esta etapa que inicia es un gran reto, puesto se le ha encomendado guiar la Iglesia de una cuarta parte de Bogotá, que cuenta con 1.600.000 habitantes dentro de una diócesis que es totalmente urbana: «Es la única de las 76 diócesis totalmente urbana en Colombia, con un canal de televisión -Cristovisión-, con seminario, una diócesis con todos los estratos sociales, muy compacta, porque está muy delimitada en la ciudad», expuso.
Sobre los desafíos que desde mañana enfrentará como Obispo de la Diócesis de Fontibón dijo que el principal será la evangelización de la gran urbe: «vamos a evangelizar urbanamente. Es lo que se llama la evangelización de lo urbano. En la posmodernidad, en un mundo de grandes avances tecnológicos, y donde las metrópolis y megalópolis desbordan las expectativas de planeación y planificación, y se sufren unas consecuencias graves, y mucho más en el tercer mundo, donde hay pobreza y desigualdad. Esos son retos muy grandes».
Añadió, además, que otros de los desafíos será el de llevar una importante labor pastoral en un mundo secularizado, «donde Dios no cuenta» -como señaló- y poder evangelizarlo de una manera «de diálogo, con cariño, respeto, pero con mucha claridad».
Mons. Córdoba asumirá desde mañana el gobierno pastoral que venía realizando Mons. Enrique Sarmiento Angulo, quien presentó el año pasado su renuncia al Papa por límite de edad, y quien es para el Secretario General del Episcopado Colombiano «un obispo maravilloso, de una gran visión y un hombre de mucha autoridad por su testimonio de vida».
Mons. Juan Vicente Córdoba
El nuevo Obispo de la Diócesis de Fontibón es ecuatoriano de nacimiento -nació el 23 de julio de 1951 cuando su familia estaba al servicio Diplomático en la Embajada de Colombia en Ecuador-, ingresó a la Compañía de Jesús en enero de 1969, recibiendo su presbiterio en octubre de 1979. Su última etapa de formación como jesuita la culminó en Canadá en 1984, y profesó en la Compañía de Jesús en febrero de 1988.
En junio del 2004 el hoy Beato Juan Pablo II lo nombró Obispo Auxiliar de la Arquidiócesis de Bucaramanga. En el 2007 fue nombrado como delegado del Episcopado Colombiano para participar de la 5ª Conferencia General del Episcopado Latinoamericano y del Caribe, que tuvo lugar en Aparecida, Brasil; en el 2008 asumió como presidente de la sección de Educación del Consejo Episcopal Latinoamericano (CELAM), y en julio del 2009 la 87º Asamblea Plenaria del Episcopado Colombiano lo nombró como Secretario General de la Conferencia Episcopal Colombiana.
Gaudium Press / Sonia Trujillo
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