México (Miércoles, 29-02-2012, Gaudium Press) El Cardenal Norberto Rivera, Arzobispo Primado de México, manifestó que sería «saludable» la aprobación de las reformas constitucionales, que incluyen una extensión de la libertad religiosa. Este pronunciamiento oficial fue hecho el pasado domingo 26 de febrero y aclara la posición de la Iglesia mexicana frente a puntos sensibles de la relación entre la Iglesia y el Estado.
Según el Card. Rivera, la Iglesia aplaude el fortalecimiento del Estado como garante de todos los derechos |
«La Iglesia no se opone a la reforma constitucional del artículo 40 de la Constitución que declara a la República como laica», anunció el Card. Rivera, «pues de facto ya lo es». El prelado aclaró que este carácter laico va unido a la imparcialidad del Estado y su respeto de la libertad religiosa de tal forma que «en materia religiosa, ni se obligue a nadie a actuar contra su conciencia, ni se le impida que actúe conforme a ella»», agregó el Arzobispo, citando la Declaración Dignitatis Humanae, del Concilio Vaticano II.
El Cardenal manifestó su apoyo al proyecto de reforma del artículo 24, que se refiere a la libertad religiosa y que en el texto propuesto incluye la libertades de conciencia y de convicciones éticas, así como una ampliación de la protección de las manifestaciones públicas de fe. En el texto actualmente vigente, sólo se incluye expresamente el derecho a la práctica privada de los actos de culto, dejando la autorización de los actos públicos a reglamentaciones posteriores.
Ante las acusaciones de sus detractores, el Arzobispo aclaró que «la Iglesia no busca con esta reforma remover el carácter laico de la educación pública, tampoco pretende interferir en los asuntos que son propios del Estado, lo único que pide es que se reconozca el derecho humano de todo ciudadano a la libertad religiosa». Su posición coincide con la opinión pública mayoritaria y el apoyo que ha recibido la propuesta en el organismo legislativo mexicano.
Como conclusión de su pronunciamiento, el Card. Rivera resaltó que la reforma busca el bien común de la sociedad mexicana: «Sería saludable la aprobación de la reforma a los artículos 24 y 40 de nuestra Carta Magna, si con ello crecemos en el reconocimiento de los derechos humanos y el fortalecimiento del Estado que sea garante e impulsor de todos los derechos».
Deje su Comentario