Roma (Jueves, 01-03-2012, Gaudium Press) Una fuerte respuesta al artículo publicado por la Revista de Ética Médica llamado «Aborto post-nacimiento: ¿por qué debería vivir el bebé?» y que promueve el infanticidio en los mismos casos en que se ha legalizado el aborto, fue redactada por el Centro de Bioética de la Universidad Católica del Sagrado Corazón, en Italia. En ella se exponen los errores del polémico artículo y se advierte sobre las graves consecuencias que generaría aceptar esas tesis.
El comunicado del Centro de Bioética comienza por señalar los orígenes y significado de las ideas expuestas en el documento: «Quien conoce el debate bioético sabe que esta tesis no es para nada original: es una reproposición, quizá ni siquiera demasiado eficaz, de las argumentaciones del bioético australiano Peter Singer, desde siempre defensor de la legitimidad del aborto voluntario y del infanticidio».
Los investigadores continúan explicando las teorías de Singer, quien «legitima el infanticidio porque los neonatos, incluso en ausencia de una condición patológica, no tendrían ningún explícito interés en vivir y en este su limbo de consciencia no gozarían ni siquiera del estatuto de persona».
Este punto es desmentido por el comunicado del centro de estudios, que sostiene que un «explícito interés por la vida», puede ser identificado en cada ser humano desde su «desarrollo primordial». No se trata de una persona en potencia como lo sugería el artículo de la Revista de Ética Médica, ni se puede reducir a un «puro conjunto de órganos interpretado por las leyes de la medicina y de la biología».
La propuesta de aceptar el aborto y el infanticidio (equiparados en el artículo para justificar este último) es legitimar «el individualismo del más fuerte que no tiene ningún ‘interés’ en el desarrollo de los intereses de aquellos que ha generado», expone el comunicado.
El centro de Bioética manifestó también su honda preocupación por el hecho de que «justo el concepto de persona, convertido en la cultura occidental la vía breve para reconocer dignidad y derechos a todos los hombres, acabe por ser utilizado para legitimar a nivel teórico la más evidente violación de los derechos humanos». Los investigadores descubren en esta violación un grave riesgo para la idea de democracia, basada en el la protección de aquellos que no pueden protegerse a sí mismos.
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