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Salta (Martes, 06-03-2012, Gaudium Press) Una decisión judicial sin precedentes motivó una respuesta inmediata por parte de los Obispos de las diócesis de la provincia de Salta, en Argentina. El juez Marcelo Domínguez, de la Cámara de Apelaciones en lo Civil y Comercial de Salta, ordenó la eliminación de todas las prácticas religiosas en las instituciones educativas públicas. Esto significaría que esas comunidades educativas no tendrían derecho a rezar antes de iniciar las clases, bendecir los alimentos, leer la Biblia o celebrar festividades religiosas. El arzobispo de Salta, monseñor Mario Cargnello; y los obispos Marcelo Colombo, de Orán; Mariano Moreno, de Cafayate; y Pedro Olmedo Rivero, de Humahuaca emitieron el pasado viernes 02 de marzo un comunicado conjunto rechazando la decisión judicial.
«La enseñanza de la religión en las escuelas públicas», afirmaron los obispos, «constituye un derecho de los padres y de los niños y niñas y un deber de los establecimientos en función del desarrollo integral de los alumnos». Los prelados también recordaron que los contenidos de la educación deben ajustarse a la voluntad de los padres de familia y que la Iglesia Católica tiene derecho a presentar los contenidos de su fe y avalar a sus docentes. «Los contenidos religiosos no se identifican con el estudio comparado de las religiones o con la sola presentación de valores», enfatizaron.
La educación religiosa es el cumplimiento de un derecho, y no una imposición que justifique una acción judicial como la que originó el comunicado. Los obispos aclararon al respecto: «No pretendemos que se enseñe a todos los niños los contenidos de la religión católica sino que todos los niños puedan recibir la enseñanza religiosa, o exceptuarse de ella, según la decisión de sus padres».
Sobre las expresiones públicas de la fe, que también fueron prohibidas por la controvertida sentencia, los prelados señalaron que «el derecho a expresar personal o comunitariamente la propia fe tiene lugar en los diversos ámbitos mientras no obstaculice actividades legítimas, como el funcionamiento de las instituciones». La decisión del juez también contradice, según los obispos, la obligación que tiene la escuela pública de respetar y transmitir la cultura e identidad del pueblo.
«Queremos exhortar a los padres y madres de familia a ejercer su legítimo derecho a la educación integral de sus hijos», declararon los obispos de Salta. «Estamos convencidos de que la educación religiosa que favorezca la identidad alimenta el legítimo pluralismo y contribuye al desarrollo de nuestra sociedad. Confiamos a nuestra provincia, sus autoridades, sus familias y, sobre todo a sus niños y niñas, a la protección del Señor y de la Virgen del Milagro», concluyeron.
Con información de AICA
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