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Lima (Lunes, 12-03-2012, Gaudium Press) Con el objeto de promover y desarrollar la asistencia religiosa, así como diversas actividades que permitan la resocialización de los presos en las cárceles peruanas, la Conferencia Episcopal del país (CEP) suramericano suscribió recientemente un convenio con el Instituto Nacional Penitenciario de Perú (INPE).
El acuerdo fue firmado el pasado 7 de marzo por Mons. Salvador Piñeiro García, Arzobispo de Ayacucho, Obispo Castrense de Perú y Presidente de la CEP; el Ministro de Justicia del País, Juan Jiménez Mayor y el jefe del INPE, José Luis Pérez Guadalupe, en un acto que ocurrió en el auditorio del Episcopado Peruano.
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| Mons. Piñeiro firma el acuerdo |
Según se menciona en nota de prensa del Sistema Informativo Semanal de la CEP, el objeto del convenio es el de fortalecer el apoyo religioso de los reclusos y el de fomentar actividades complementarias que ayuden con el tratamiento y la inclusión social de los internos que están presos en los establecimientos carcelarios peruanos. Tarea que se realizará a través de la labor de la Pastoral Carcelaria de las jurisdicciones eclesiales.
Precisamente, entre los aspectos que quedaron consignados en el acuerdo, se buscarán alternativas para que los talleres de promoción humana y desarrollo personal que promueve la Pastoral Carcelaria puedan ser aceptados e incorporados como parte del tratamiento de los presos, con el apoyo de los directores de los establecimientos penitenciarios.
En el discurso que dirigió durante la firma del acuerdo, Mons. Piñeiro García recordó que el preso «es el rostro de Cristo», y que los católicos, al creer en la conversión del hombre, «para que tenga posibilidades de rehabilitarse y de regresar a la sociedad», deben ofrecerles «esa medicina», que es la misma conversión.
Igualmente, comentó que como Obispo Castrense conoce muy de cerca la realidad de los presos y sus necesidades, así como el esfuerzo en la labor que presta el INPE. Igualmente destacó el trabajo que desde hace varios años vienen realizando sacerdotes, religiosos y religiosas, así como laicos comprometidos que prestan un servicio en la Pastoral Carcelaria, acompañando y guiando a los presos a nivel espiritual.
En Perú hay más de 50 mil reclusos en los centros penitenciarios del país, de los cuales el 42% están sentenciados y el 58% procesados. En todo el territorio del país suramericano existen más de 75 centros penitenciarios.
Con información del Sistema Informativo Semanal de la Conferencia Episcopal Peruana.
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