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México (Jueves, 15-03-2012, Gaudium Press) Aunque se encuentran oficialmente registradas 350 mil personas para asistir a la Eucaristía que presidirá Benedicto XVI el próximo 25 de marzo, «las autoridades eclesiásticas y el gobierno están esperando la participación principalmente ese día domingo de cerca de un millón y medio de personas». Así lo afirmó el director de comunicación y prensa de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM), Lic. Samuel Nájera, en entrevista con Radio Vaticano.
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| Las 3 campanas de la Catedral Basílica Metropolitana de León regresaron al templo el pasado 10 de marzo, después de haber sido refundidas, para recibir a Benedicto XVI |
El cálculo obedece al convencimiento de las autoridades de la presencia multitudinaria de habitantes de Guadalajara, Aguas Calientes, Zacatecas y Morelia, relativamente cercanas a la diócesis de León, sede de la visita papal. Estas poblaciones «difícilmente perderán la espontaneidad y se volcarán para hacerse presentes para tener ese punto de encuentro con el Santo Padre», afirmó Nájera.
También se tiene prevista la llegada masiva de extranjeros que aprovechen la cercanía de Su Santidad. «Cada vez crece más la expectativa, ciertamente están pendientes los cierres de las calles, algunos aspectos técnicos, cómo se va a recibir a los peregrinos, el lugar donde puedan tener un punto para pasar la noche como son campamentos, se están ultimando las medidas de seguridad con protección civil, de atención médica, puntos de alimentación, de hidratación», concluyó Nájera.
El ritmo naturalmente vertiginoso que adquiere la preparación de un evento tan grande como es la visita del Santo Padre en un país con una fe católica tan arraigada contrasta con la preparación espiritual que Benedicto XVI lleva a cabo para poder cumplir su misión en tierras mexicanas. Según informó a Zenit monseñor Giovanni Angelo Becciu, sustituto de Asuntos Generales de la Secretaría de Estado del Vaticano, Su Santidad refleja mucha tranquilidad. Para el viaje, «el Santo Padre se prepara estudiando la situación, alistando los discursos y en oración». «Lo he encontrado muy sereno», añadió finalmente.
Esta misma paz se refleja en la preparación de un encuentro casual que ha pasado desapercibido para los medios y las agendas informativas: Benedicto XVI se encontrará con su Madre, bajo la advocación de Nuestra Señora de Guanajuato. La cita tendrá lugar justo antes del encuentro de Su Santidad con el presidente mexicano Felipe Calderón en la Casa del Conde Rul. Como esta mansión se encuentra a pocos pasos de la basílica de Nuestra Señora de Guanajuato, «se sacará la imagen de la Santísima Virgen a la puerta de la iglesia para que el Papa le dé la bendición, y la Virgen le dé la bendición al Papa», anunció a Zenit monseñor Juan Rodríguez Alba, abad de la basílica..
«Esta ocasión es especial», afirmó Mons Rodríguez. «Cuando vemos o escuchamos a un hijo buscando a su madre de inmediato nos llenamos de ternura, pero cuando una madre busca a su hijo, sabemos que además de esa ternura existe la protección, la guía y la esperanza. La Virgen saldrá al encuentro del Santo Padre durante su recorrido hacia la casa del Conde Rul. Le pedimos a nuestra patrona siga ayudándole en esta labor difícil de realizar la misión de vicario de Cristo», concluyó.
Con información de Zenit, Radio Vaticano y ACI.
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