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Viseu (Miércoles, 21-03-2012, Gaudium Press) Mons. Ilídio Leandro, obispo de Viseu, región central de Portugal, afirmó el pasado domingo, que el mandato misionero dejado por Jesús a sus discípulos «continúa de pie y está más actual que nunca», en medio de la coyuntura socioeconómica que se apoderó de la sociedad.
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| Mons. Ilídio Leandro, obispo de Viseu, región central de Portugal |
Según nota publicada por el gabinete de comunicación de la diócesis, Mons. Ilídio Leandro finalizó el Año Vocacional Comboniano recordando los pedidos de ayuda «que llegan en el silencio de tantos que no tienen voz y en el sufrimiento de los que no tienen nadie que los escuche y les dé vida con sentido y con esperanza».
Delante de un público de aproximadamente dos mil personas, Mons. Ilídio afirmó que «la llama encendida por San Daniel Comboni, fundador de los Misioneros Combonianos del Corazón de Jesús, continúa siendo una bella aventura para la vocación, en medio de los que necesitan pan, paz, libertad».
El responsable viséense aprovechó también para recordar algunas figuras que, a semejanza del obispo italiano (1831-1881), canonizado en 2003, encarnaron la «locura» del amor de Dios. Madre Teresa de Calcuta, el Papa Juan Pablo II e Idalina de Aguiar de Beira, entre otras personalidades católicas, dejaron una marca de «generosidad, de alegría, de amor, de entusiasmo» en el mundo que, según Mons. Ilídio Leandro, puede y debe ser prolongada.
Para el prelado, «hay caminos no andados que esperan por alguien y la Pascua de este año puede abrir horizontes para la vocación de quien quiere ser feliz, ayudando a hacer felices a los otros.
La congregación de los Misioneros Combonianos del Corazón de Jesús fue fundada por San Daniel Comboni el 1 de junio de 1867, en Verona, Italia. El instituto religioso llegó a Portugal en 1947, y hoy tiene casas en seis ciudades, reuniendo cerca de una centena de religiosos.
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