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Asunción (Miércoles, 22-04-2009, Gaudium Press) Por medio de un comunicado, la Conferencia Episcopal Paraguaya (CEP) aseguró este martes que no recibió denuncia alguna de la supuesta paternidad del ex-obispo y presidente del país, Fernando Lugo, cuando este todavía pertenecía a la vida eclesiástica.
«La Conferencia Episcopal Paraguaya nunca recibió denuncia formal por escrito en relación a Lugo y a cuestiones de supuesta paternidad», dice el texto.
El obispo de Alto Paraná y Canindeyu, Rogelio Livieres, habría dicho a la prensa que «la Iglesia tiene los nombres de las mujeres» que denunciaron a Lugo. Livieres también habría afirmado que monseñor Antonio Lucibello, nuncio apostólico en Paraguay entre 2002 y 2004, recibió denuncias por escrito en que las mujeres acusaban la paternidad del presidente.
«Si la denuncia fue presentada delante a la Nunciatura Apostólica, su tratamiento y definición fueron de exclusiva competencia de la [institución] mencionada», afirma la nota de la CEP. La Nunciatura es la representación diplomática del Vaticano.
«Eso (supuestas paternidades de Lugo) todo el mundo sabía, en varios sectores todos los datos eran analizados. La Iglesia falló al no haber hablado con mayor claridad», afirmó monseñor Livieres.
El comunicado de la CEP dice que el consejo «lamenta y rechaza las expresiones del monseñor Rogelio Livieres que hacen entender que hubo encubrimiento o complicidad de los obispos de Paraguay sobre la conducta moral del entonces miembro del colegio episcopal».
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